En Europa la última “cola” del invierno nos deja como recuerdo unas temperaturas más frescas y unas gotas de lluvia (afortunadamente) para regar céspedes y cultivos. Aunque es sólo un breve alivio. Pronto necesitaremos actualizar el sistema de riego para mantener el césped verde y exuberante. Y desperdiciaremos mucha agua preciosa. ¿O no?
Riego por IA
el californiano Irriverde ha desarrollado un innovador sistema de riego, que tiene como objetivo reducir los residuos. Reducirlos a la mitad, para ser precisos.
La tecnología de pulverización patentada de Irrigreen distribuye el agua uniformemente a través de boquillas giratorias controladas por computadora. El sistema adopta un enfoque "bajo demanda", lo que significa que suministra agua sólo donde y cuando se necesita.
¿Como? Gracias a sensores que detectan la humedad del suelo, la lluvia y otros factores ambientales, direccionando el flujo de agua de forma automática y en tiempo real. ¿Resultado? Menos costes de riego, césped y jardín más sanos y ahorro de energíaagua. Muchos ahorros.
media agua
Gracias a los datos meteorológicos recopilados por la aplicación, el sistema proporciona riego sólo donde el césped lo necesita. En la práctica, si ha llovido bastante, el riego automático no se activará.
No sólo eso: una aplicación en su teléfono inteligente registra la configuración del jardín, un poco como lo hace un robot cortacésped. Si el césped está seco sólo en algunas zonas, Irrigreen intervendrá sólo donde sea realmente necesario. Si el jardín tiene caminos u otras estructuras, estas no se regarán. El dispositivo también permite evitar fuentes, columpios o terrazas en el centro del jardín.
Según la empresa, estas características del sistema permiten reducir el 50% la cantidad de agua necesaria para regar el césped.
En fin
Reducir el consumo de agua es fundamental, y hacerlo en el jardín es una gran idea. Una unidad familiar puede consumir hasta aproximadamente 1.200 litros de agua al día, y el 30% de este volumen se utiliza para regar el césped. Si consideras que hay zonas ya afectadas por severas sequías que limitan drásticamente el uso del agua, incluido el riego, entenderás que esto no será un simple truco, sino una necesidad.
La IA, nos guste o no, también echará una mano en el jardín.