¿Cuáles son las habilidades a desarrollar?
Sobrevivir es un concepto relativo: se puede prescindir de mucho, pero más allá de la filosofía fácil, un mundo inmersivo como el nuestro caracterizado por una enorme cantidad de información, es una jungla difícil de atravesar sin tener hombros fuertes. Aquí hay 5 habilidades en las que enfocarse para la sociedad en los próximos años:
1 - Saber gestionar las comunicaciones
Según Nielsen, en el primer trimestre de 2010, los adolescentes europeos enviaron y recibieron una media de 3000 mensajes de texto al mes. El centro de estudios también encontró que más de 4 de cada 5 adolescentes duermen con sus teléfonos al lado de sus camas y son reacios a apagarlos. Los casos de insomnio crónico y estrés informativo están aumentando entre los jóvenes: los hospitales tendrán pan nuevo en el futuro para estos nuevos tipos de adultos hiperconectados.
La comunicación es un elemento clave de nuestras vidas, pero si se lleva a los extremos (demasiado o muy poco) puede tener consecuencias nefastas.
Constantemente estamos abriendo nuevos canales de comunicación para juegos, redes sociales, aplicaciones en teléfonos inteligentes, y esto provocará ansiedad por 'contacto excesivo' así como 'ansiedad por desapego' cuando tengamos que prescindir de él. La capacidad adecuada para gestionar nuestras comunicaciones es una habilidad que nadie enseña hoy: tendremos que aprenderla.
2 - Saber aprovechar las oportunidades
El trabajador autónomo estadounidense promedio ya ha realizado 11 trabajos diferentes en los primeros 30 años de vida: a este ritmo, dentro de una década el mundo estará lleno de trabajadores autónomos que ya han trabajado en cientos de proyectos diferentes a los 30 años. El trabajo a corto plazo (sea lo que sea lo que puedan esperar los trabajadores precarios de todo el mundo) sustituirá a muchos trabajos "fijos" o de larga duración.
El mundo del trabajo se volverá aún más fluido, y la fuerza centrífuga será el mercado digital, que pondrá en contacto cada vez más rápido a vendedores y compradores, oferta y demanda, necesidad y satisfacción.
Las oportunidades serán breves, rápidas, numerosas: la capacidad de buscarlas, seleccionarlas y ponerlas en buen uso será un ingrediente muy importante para lograr el éxito en la sociedad del futuro cercano.
3 - Gestionar la tecnología
Cada vez más dispositivos tecnológicos entran en nuestra vida minuto a minuto: ¿a cuántos debemos prestar atención? La tecnología que utilizamos define nuestra capacidad para mantenernos al día. Durante muchos años este proceso de selección se ha relegado a los autoproclamados expertos en un sector.
La gestión de la tecnología va mucho más allá de la compra del último producto de moda: definirá cada vez más nuestra pertenencia a un espacio cultural más que a otro. En un futuro no muy lejano, saber 'qué tecnología somos' nos ayudará tanto a orientarnos como a saber cuál es nuestro alineamiento político o ideológico.
4 - Deja un rastro de ti mismo
¿Cómo seremos recordados por las generaciones futuras? ¿Cómo se percibirán nuestros éxitos, nuestros fracasos, nuestros esfuerzos? Tengo una idea clara de mis abuelos y su generación, al igual que tengo una idea clara de la generación de mis padres.
¿Es mio? ¿Qué dejará para la posteridad? La gente de hoy tiene muchas oportunidades para proporcionar información "para referencia futura": hay mucha más comunicabilidad entre generaciones que en el pasado. Podemos transmitir una gran cantidad de fotos, videos, documentos en línea a nuestro patrimonio.
Mi idea es producir tanto material como sea posible: un día mi bisnieto podría hablar con una versión virtual de mí: lo ayudaré a ser lo más fiel posible a su original, dándome una pizca de eternidad.
5 - Gestionar relaciones
En un mundo cada vez más 'social' acabaremos conociendo a miles de personas, pero ¿qué tipo de relación tendremos con ellos? ¿Cómo lograremos calificar y cuantificar el valor de estos contactos?
Cuanto más se extiende la red social de un individuo, más difícil es que sus vínculos se mantengan fuertes y estables: tendemos a aplicar instintivamente reglas diferentes para aquellos con quienes tenemos vínculos de diferente fuerza, pero la forma misma de establecer relaciones está cambiando radicalmente en el era digital.
¿Cuánto de esta nueva perspectiva sobre las relaciones aportaremos a los vínculos cotidianos? El matrimonio no es necesariamente una institución moribunda (al menos no a mediano plazo), pero es cierto que redefinir la forma en que nos unimos es una habilidad crucial a considerar para el futuro.