La humanidad siempre ha intentado superar sus límites: desde el descubrimiento de la rueda, que amplió nuestros horizontes, hasta las tecnologías modernas que ellos prometen Para mejorar nuestra inteligencia, somos testigos de revoluciones que han moldeado nuestro destino.
¿Qué pasará hoy cuando la tecnología no sólo amplifique nuestras capacidades, sino que nos desafíe a revisar la definición misma de inteligencia? Hablemos de inteligencia evolutiva.
Dejemos de lado la prueba de Turing
Con su famosa prueba que pasó a la historia, Alan Turing propuso un criterio para determinar si se podía considerar que una máquina tenía “inteligencia”. Pero hay un problema fundamental con este enfoque: la prueba se basa en una visión de la inteligencia centrada en el ser humano.
La inteligencia no debería definirse simplemente por nuestra capacidad de distinguir entre un humano y una máquina en una conversación. Después de todo, los humanos somos notoriamente deficientes en muchas áreas, a menudo impulsados por las emociones, las ilusiones y la pereza cognitiva.
¿Por qué querríamos modelar la inteligencia artificial según nosotros? La inteligencia evolutiva es un nuevo modelo que pretende compensar las deficiencias del sistema cognitivo humano (también moralidad y ética).
Deja de pensar que las máquinas nos dominarán
¿Recuerdas cuando a los coches los llamaban “carros sin caballos”? Esta terminología limitada todavía reflejaba la visión del transporte construido enteramente alrededor de cuadrúpedos. Del mismo modo, muchos de nosotros todavía vemos las computadoras como cajas llenas de microchips: pero las computadoras son cada vez más pequeñas, más potentes y más conectadas.
Pronto se volverán completamente invisibles, integrándose perfectamente en nuestro entorno y ayudándonos de formas que ni siquiera podemos imaginar.
Y queremos hablar del debate sobre la IA ¿Y su amenaza potencial para la humanidad? Algunos incluso pidieron una pausa en el desarrollo de la IA debido a los peligros potenciales (excepto más adelante comenzar a desarrollarlo a su vez). Pero es esencial distinguir entre las cualidades humanas de agresión y competencia y las capacidades de las máquinas: los humanos tenemos estas características psicológicas porque eran ventajosas para nuestra supervivencia. ¿Pero los coches? No es del todo seguro que quieran subyugarnos, al contrario. Lo más probable es lo contrario: que los brutalicemos.
La Inteligencia Evolutiva es un apoyo: delegamos, no abdicamos
En una época en la que nuestra privacidad parece estar constantemente bajo ataque, la Inteligencia Evolutiva podría ser la solución. Imagine un mundo en el que su interfaz digital personal negocia en su nombre cada vez que se solicita su información personal.
Puede parecer ciencia ficción, pero es sólo un ejemplo de cómo la Inteligencia Evolutiva podría ayudarnos. La tecnología tiene el potencial de mejorar nuestras vidas, pero sólo si la desarrollamos con una mente abierta e informada.
Esforcémonos en crear proyectos que no sean necesariamente "a nuestra imagen y semejanza" y cambiaremos nuestro futuro para mejor.