Varios países intentan con diferentes fortunas para hacer frente a la crisis climática (esperando que la tecnología dé el paso decisivo), pero nadie en el mundo es como Costa Rica.
La sostenibilidad ambiental es cada vez más importante, y las soluciones para combatir la crisis climática son cada vez más necesarias.
El índice planeta feliz, un índice que mide el impacto ambiental de los estados y el bienestar de los ciudadanos coloca a Costa Rica en el 1er lugar del mundo.
Un pais muy verde
Costa Rica ha impuesto impuestos cada vez más altos a los combustibles fósiles para financiar la protección forestal y las inversiones en energía renovable.
En solo 30 años, duplicó la extensión de sus bosques e introdujo el concepto de que todos los costos de usar combustibles fósiles deben ser pagados dos veces por quienes los usan, para compensar el daño a la comunidad.
El objetivo de hoy es el más ambicioso de todos: descomponer por completo el plástico y los fósiles para 2021. Si hay un país que puede hacerlo es Costa Rica, al fin y al cabo, alberga la mayor hidroeléctrica de Centroamérica, en el río Reventazón, que por sí solo suministra el 75% de la energía a partir de renovables.
Activos y beneficios
Con el 99% de la energía proveniente de fuentes renovables desde 2014, Costa Rica ya ha hecho historia. En 2018 se mantuvo en energías renovables durante más de 300 días de 365. Solo falta un pequeño esfuerzo.
En cuanto al uso de plástico, el objetivo es reemplazarlo al 100% por alternativas reciclables y / o biodegradables.
Hablar con el presidente
Carlos Alvarado Quesada es muy optimista sobre el futuro ambiental de Costa Rica y el presidente Quesada sostiene que el país "debe ser el primero en el mundo en completar la descarbonización".