En la tranquila ubicación de Panera Bread en Fleming Island, Florida, Dennis Brown tenía la costumbre de pedir dos bebidas una tras otra. Nadie hubiera pensado jamás que esta rutina podría tener consecuencias fatales. El pasado 9 de octubre, tras consumir una bebida energética (una “Charged Lemonade”) Brown sufrió un paro cardíaco mortal.
Este trágico suceso ha puesto de relieve las bebidas con altas dosis de cafeína, que ahora se han convertido en un pilar de la cultura moderna, y ha planteado una pregunta importante: ¿se ha vuelto peligrosa la obsesión colectiva por estas bebidas energéticas?
La historia detrás del “caso”
La muerte de Brown provocó una demanda contra Panera Bread: la teoría es que Brown, normalmente un consumidor de té helado, cerveza de barril o agua, no era consciente del contenido de cafeína en Charged Lemonade. En su tamaño de 800 ml, la típica taza estadounidense de 30 onzas, la bebida contiene 390 ml de cafeína: una dosis peligrosamente cercana al límite establecido. y por la FDA americana que por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA)
En cualquier caso, la fiscalía afirma que la bebida ni siquiera se anuncia como bebida energética. elizabeth crawford, abogado de la familia Brown, llamó a la bebida "un lobo con piel de oveja".
Panera Bread, por su parte, se defiende afirmando que el triste suceso no fue provocado por uno de sus productos. La inestable condición médica de Dennis Brown (así como la de un estudiante que sufrió un paro cardíaco en 2019 luego de beber la misma bebida energética) sería la causa principal.
Quien tiene razon
Mientras tanto, hay que decir que estos dos casos denunciados no son ciertamente los únicos.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) ha recibido informes de 18 muertes sospechosas y 150 hospitalizaciones potencialmente relacionado con el consumo de bebidas energéticas. En otro caso, cinco personas podrían haber muerto en los últimos tres años después de beber Monster Energy, una popular bebida energética rica en cafeína. Incluso en Canadá los informes son diferentes y, en general, las sospechas no son descabelladas: algunos estudios han sugerido que el consumo de bebidas energéticas puede estar asociado con problemas cardíacos y otros problemas de salud.
Lo preocupante, sin embargo, es la tendencia.
Una tendencia creciente: bebidas cada vez más fuertes
El caso de Brown arroja luz sobre una tendencia preocupante: la creciente fuerza y popularidad de las bebidas con cafeína. En enero de 2022, Prime, una bebida energética desarrollada por estrellas de YouTube Logan Paul e KSI, ha causado estragos en Internet, especialmente entre sus 40 millones de seguidores de Instagram, en su mayoría jóvenes.
Esto, si se mira más de cerca, es una tendencia dentro de una tendencia: el auge de las bebidas energéticas en las últimas décadas se debe en gran medida a su marketing, muchas veces dirigido a jóvenes y adolescentes. Los equipos de fútbol, los deportes extremos, los deportes electrónicos y los influencers "bombean" estas "cargas de cafeína" a todo trapo. Una ronda de mil millones de euros/dólar.
¿Resultado? Los adolescentes y los niños (sí, niños) se encuentran entre los mayores consumidores de estas bebidas. Como si no estuvieran ya lo suficientemente "objetivos" Alimentos ultraprocesados.
Bebida energética, abuso de los jóvenes: algunos datos
Segundo un estudio encargado por la EFSA, el grupo de edad con mayor probabilidad de consumir bebidas energéticas es el de los adolescentes, con 68% del total de encuestados. Para los niños de entre 3 y 10 años, las bebidas energéticas son aproximadamente el 43% de su exposición total a la cafeína.
Otro estudio encontró que el 41% de los adolescentes en Europa consumen bebidas energéticas con fines de actividad física, aunque en cuanto al consumo por países, los datos varían. Por ejemplo, entre los adolescentes, el consumo oscila entre el 48% en Grecia y el 82% en la República Checa, y entre los niños, entre el 6% en Hungría y el 40% en la República Checa.
Regulación y preocupaciones de salud
Además de contener grandes cantidades de cafeína, los ingredientes añadidos a algunas bebidas energéticas también pueden ser perjudiciales. "Las bebidas energéticas suelen contener otros estimulantes como vitamina B, L-carnitina, L-teanina y glucuronolactona", afirma. Alex Ruani, investigador de doctorado en el University College London. "Cuando se combinan, enfrentan a los bebedores con un cóctel potencialmente peligroso que puede alterar múltiples sistemas del cuerpo, incluidos el cerebro y el corazón". También es posible volverse adicto a él. "Que así sea azúcar que cafeína tienen propiedades adictivas”, afirma Ruani, que también señala de múltiples ingresos hospitalarios y muertes de niños y adultos atribuidos al consumo de bebidas energéticas.
La creciente preocupación por estas bebidas ha llevado a intervenciones regulatorias en varios países a lo largo de los años. Naciones como Lituania, Letonia, Turquía y Polonia han introducido prohibiciones generales sobre la venta de bebidas energéticas a menores de 18 años. En el Reino Unido, una consulta gubernamental que comenzó en 2018 sobre una prohibición similar se detuvo durante la pandemia. Estas medidas responden a una tendencia moderna, pero también son parte de un patrón que se remonta a más de un siglo atrás, cuando ya en 1909 el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos expresó su preocupación por la cantidad excesiva de cafeína en la Coca-Cola (que mientras tanto , con sus 39 mg de cafeína por lata, quedó superado).
Bebida energética, necesitas una visión más saludable
Ante estas preocupaciones, el mercado está asistiendo a una transición de las bebidas energéticas hacia productos percibidos como más saludables. Sin embargo, los expertos advierten que agregar ingredientes "saludables" no convierte automáticamente una bebida energética en un tónico para la salud; en todo caso, es una tendencia que corre el riesgo de volverse aún más sutil y peligrosa.
¿Cómo se resuelve entonces? La información y la educación de los consumidores podrían ser la clave para evitar futuros accidentes y promover opciones más saludables. Panera Bread, para cerrar el círculo y por razones obvias, lo entendió antes que los demás. Ahora, en la etiqueta de sus bebidas energéticas y en su página web ha añadido advertencias claras: “usar con moderación. NO RECOMENDADO PARA niños, personas sensibles a la cafeína, mujeres embarazadas o en período de lactancia."
¿Es muy dificil?