La búsqueda de fuentes de energía sostenibles ha llevado al desarrollo de tecnologías innovadoras, como las células solares orgánicas semitransparentes, que ofrecen muchas posibilidades, incluido su uso en los tejados de invernaderos ecológicos.
Su adopción, sin embargo, se ha visto frenada por el desconocimiento de la tecnología y las dudas sobre su impacto en los cultivos. Hoy, tal vez, la percepción de las masas podría empezar a cambiar. Investigadores de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) han demostrado que el uso de estas células solares semitransparentes en un invernadero en miniatura conduce a un crecimiento de las plantas sorprendentemente mejor que en un invernadero convencional.
Semitransparente, eficiente. y estable
Hay más información sobre el estudio que se acaba de realizar y publicar en Nature (lo enlazo aqui). Una manera de superar también el defecto "congénito" de las células solares orgánicas: su escasa estabilidad. El equipo añadió una capa de una sustancia química llamada L-glutatión, que se encuentra naturalmente en los suplementos dietéticos antioxidantes, y descubrió que esta solución evitaba la degradación de las células solares orgánicas semitransparentes. No solo eso, la capa de L-glutatión bloqueó los rayos ultravioleta e infrarrojos, que pueden dañar las plantas y provocar el sobrecalentamiento de los invernaderos. Este, a todos los efectos, es el punto de inflexión de la investigación.
"No esperábamos que las células solares orgánicas superaran a los invernaderos convencionales, pero repetimos los experimentos varias veces con los mismos resultados", afirma. Yepin Zhao, autor principal del estudio. Además, después de más investigaciones y análisis, los investigadores descubrieron que las plantas no necesitan tanta luz solar como se pensaba inicialmente. De hecho, demasiada exposición al sol puede hacer más daño que bien, especialmente en climas como California, donde la luz del sol es más abundante. Por tanto, gracias a las células solares orgánicas, las plantas pueden crecer mejor y más sanas que el exceso de luz solar. Un descubrimiento sorprendente que podría cambiar la forma de cultivar las plantas en el futuro.
Más detalles sobre los resultados
Los resultados de la prueba mostraron que las células solares orgánicas semitransparentes con la capa protectora de L-glutatión mantuvieron una eficiencia superior al 80% después de 1.000 horas de uso continuo. Sin esta capa se han ido menos de 20%. Cifras importantes que despiertan entusiasmo: los mismos investigadores han creado una startup en la UCLA que quiere llevar estas células solares orgánicas semitransparentes a escala industrial.
En otras palabras: los invernaderos ecológicos y solares están definitivamente a punto de abrirse camino. Nueva vida para la agrovoltaica, señores. ¿Alguien todavía lo duda?