La aplicación de audio social Clubhouse nació durante una pandemia y tuvo un año increíble. Más de 10 millones de descargas para una aplicación solo por invitación y solo para iOS es un logro rotundo.
Por este motivo, casi todas las plataformas sociales quieren copiar la nueva red social Clubhouse. Y siempre por eso, ahora el audio social del recién nacido debe empezar a luchar por su supervivencia.
La casa club aún enfrenta sus mayores desafíos.
Primero, la contracción (lenta, al menos en Italia) de la pandemia traerá de vuelta el interés en la socialización en vivo. Si cree que su patio trasero o espacio abierto competirá con el audio social, tiene toda la razón.
Y en cualquier caso, aquellos que quieran seguir chateando online siempre tendrán más lugares para hacerlo.
En caso de que no te hayas mantenido al día: Twitter, Facebook (según se informa), LinkedIn, Discord, Spotify e Flojo todos han lanzado o están trabajando en sus propios intentos de audio social: el espacio está a punto de llenarse.
La gran preocupación con Clubhouse Social es que el audio social sigue la misma trayectoria que la función Historias de Snapchat. Una idea brillante, pero comienza a vivir en todas las aplicaciones a expensas del recién llegado que fue pionero en el formato.
Y el audio social no es una excepción, porque está aterrizando en todas las aplicaciones.
Con la amenaza en aumento, vale la pena comprender dónde es más probable que Clubhouse tenga más problemas.
En primer lugar, comencemos con el Pro.
¿Qué ofrece la aplicación Clubhouse?
Fue el primero en introducir el audio social, y eso ya es algo. Hay millones de usuarios que traen contenido de audio exclusivo al Clubhouse. Entre ellos también Elon Musk, Mark Zuckerberg, Bill Gates y otras celebridades que también usan la aplicación de audio social para anuncios oficiales (como el CEO de Slack stewart butterfield). Clubhouse ya está en los titulares de las declaraciones de los suscriptores, y es algo mucho más complicado de clonar para otras empresas.
Las personas también desarrollan hábitos en torno a la aplicación Clubhouse, lo cual es una señal positiva para la retención de usuarios. El programa que dará a los usuarios de Social Audio la posibilidad de monetizar y recursos para mejorar sus Salas también está a punto de comenzar.
Lo mejor de todo es que la aplicación solo ha contratado personal en el último mes. La empresa robó recientemente fadia kader de Instagram para liderar sus asociaciones de medios y creadores. Kader en Instagram trabajó con músicos para ayudarlos a optimizar su trabajo en la plataforma.
Presumiblemente, hará algo similar en Clubhouse social. Tambien ha llegado maya watson de Netflix para convertirse en el jefe de marketing global. Esto significa que Clubhouse pronto dedicará recursos a la promoción, en lugar de depender del boca a boca. Todos estos son pasos importantes para mantener la casa club interesante y próspera.
Llegamos ahora a los (graves) peligros para Clubhouse
El audio social se enfrenta a la competencia de algunas de las plataformas más grandes del mundo. Realities que ya tienen años de experiencia, ya están disponibles en iOS y Android y tienen una base de usuarios masiva y leal a la que pueden impulsar nuevos formatos de audio social.
Algunas empresas como Twitter y Discord ya han transmitido capacidades de audio social de voz en vivo a sus millones de usuarios con casi la misma interfaz que Clubhouse.
Cualquiera que no tenga una invitación al Clubhouse (por cierto, si me acompañas en el Canal de telegramas de Futuroprossimo Tengo que ceder) podrá acceder a la magia del audio social en otras aplicaciones.
El peor peligro para Clubhouse, sin embargo, es la facilidad con la que podría perder a los "VIP" en su plataforma.
Spotify, que anunció esta semana que adquirió Betty Labs, el creador de una aplicación social de audio llamada Vestuario. Planea llevar la aplicación a Android, cambiar su nombre y ampliar su cobertura a la música, la cultura y los deportes.
A partir de ahí, podría empezar a intentar adquirir (incluso con mucho dinero) el talento de algunos nombres interesantes. Los músicos, que también se sienten atraídos por Clubhouse, podrían recurrir a la aplicación Spotify para mantener buenas relaciones con el gigante de la música.
Si las estrellas deciden pasar su tiempo en otra parte, Clubhouse también flaqueará.
Funciones cruciales para defender posiciones en el campo del audio social
Los competidores feroces de Clubhouse están refinando características que mejoran la oferta nativa. Por ejemplo, la posibilidad de grabar conversaciones para escuchar bajo demanda: sería un excelente paso en la dirección de los podcasters.
Hogar, audio social cofundado por Mark Cuban, permite a las personas insertar efectos de sonido, como música, y grabar programas para distribuirlos en plataformas de podcasts, así como reproducirlos posteriormente en la propia aplicación. Es probable que Spotify haga lo mismo con su aplicación y dependa de su software Comercial para gestionar el alojamiento y la distribución. El gerente de productos de consumo de Twitter Afirmó que la red social twitter también permitirá a las personas grabar sus propios espacios de forma nativa (las nuevas “salas” de audio se llaman así). Clubhouse no creó esa funcionalidad, lo que limita a sus usuarios a conversaciones en vivo difíciles de seguir si entra en el proceso de escuchar.
¿Clubhouse es el nuevo Snapchat?
Las historias hicieron de Snapchat un éxito. Snapchat fue pionera en la idea de contenido efímero y devolvió una apariencia de autenticidad a las redes sociales, pero la función no tardó mucho en llegar a sus competidores.
Los mismos que ahora también tiene que afrontar Clubhouse.
Para que su negocio funcione, Snapchat duplicó su aplicación de Android, hizo que la aplicación fuera más accesible para los nuevos usuarios e hizo asociaciones de contenido con empresas de medios y entretenimiento. Ahora vuelve a crecer (ligeramente) la actividad publicitaria, pero al final es Instagram el que ha conseguido la primacía en las Stories.
Clubhouse no aloja anuncios, pero este será el siguiente paso para convertirla en una plataforma autosuficiente.