Aceptémoslo, es la pesadilla de niños y adultos paranoicos la de estar en el hotel, relajados y en la tranquilidad de su intimidad (me gustó, lo recorrí muy bien), y luego descubrir que un voyeur desconocido los espiaba. .
Sin embargo, incluso los teóricos de la conspiración lo adivinan. Realmente sucedió. La cadena de hoteles japonesa HIS Group se disculpó con los clientes por ignorar posibles señales de que sus robots en las habitaciones han sido pirateados, lo que permite a extraños espiar de forma remota las actividades de los huéspedes.
El Henn na Hotel está prácticamente dirigido por robots, algo así como el hotel futurista de Alibaba en China. Los huéspedes son recibidos por androides con formas humanoides o dinosaurios antes de dirigirse a sus habitaciones.
Una vez en la puerta, la tecnología de reconocimiento facial dará luz verde y los clientes satisfechos entrarán en la habitación, recibidos con alegría por otro robot asistente.
Lo siento, ¿podríamos al menos volver la cabeza sobre esto antes de...? - ¿Qué estás diciendo, cuáles son estos pensamientos? ¡Es solo un trozo de hojalata! Ven aquí, copulemos sin dudarlo, lejos de miradas indiscretas!
Algo salió mal con los robots
Hace unas semanas, un experto en ciberseguridad reveló en Twitter que ya había advertido en julio a los líderes de HIS Group sobre el riesgo de que los robots en las habitaciones de los hoteles japoneses pudieran ser fácilmente pirateados. Con un poco de práctica habría sido posible conectarlos a la red y utilizar de forma remota la cámara y el micrófono que se suministran con los dispositivos.
El silencio de la empresa hizo sospechar al investigador, quien la semana pasada decidió hacer pública la vulnerabilidad de los robots.
El hotel Henn Na es uno de los 10 hoteles japoneses que usa robots para sustituir a todo o parte del personal interno.
El "defecto" por el momento se encontró solo en los robots de un modelo, el Tapia (puedes verlo en la foto: parecía inofensivo), no está claro si el problema también se encuentra en otras instalaciones de alojamiento.


Mientras tanto, explica el Reportero de Tokio, HIS Group finalmente se ha revelado con un tweet clásico lleno de elegante formalismo japonés: "Nos disculpamos por cualquier inconveniente causado".
El periódico informó que la empresa consideraba que los riesgos eran bajos en general y no había tomado ninguna medida al respecto.