En el vasto panorama de las energías renovables, de vez en cuando es posible vislumbrar una solución que promete cambiar la forma en que vemos las cosas. Hoy es un mini panel solar que tiene un truco especial bajo la manga: la luz láser.
Vemos la fotovoltaica vista bajo una luz diferente
El mundo de la energía fotovoltaica está en crisis. Un equipo de mentes brillantes de Laboratorio Nacional de Energías Renovables (NREL), una entidad del Departamento de Energía de Estados Unidos, ha anunciado un cambio radical.
Investigadores han desarrollado minicélulas capaces de operar con luz láser: su investigación, publicada en la prestigiosa revista Materiales de energía solar y células solares (te lo enlazo aqui), muestra una tecnología que no sólo es innovadora, sino también económica. ¿Y la guinda del pastel? No hay necesidad de procesos complejos como la litografía. Un simple trazo láser lo hace todo. ¿Lindo, no?
¿El ingrediente 'secreto' del láser solar? Silicio
Exactamente él: ese mineral que encontramos en casi todas partes de nuestro planeta. Pablo Stradins, el cerebro detrás de esta invención usó silicio como componente clave. Pero no nos detengamos aquí. Estos minipaneles, con su resistencia de contacto extraordinariamente baja, son perfectos para operar bajo el sol abrasador.
Y para los más técnicos, experimentaron con una capa muy fina de dióxido de silicio de alrededor de 1,5 nm (nanómetros). ¿Continuo?
Bueno. Tenían estas mini células solares y descubrieron que podían combinarlas en micromódulos simplemente apilándolas. Durante las pruebas, utilizaron diez de estas células, pero en teoría podrían utilizar tantas como quisieran. Y esto no termina aquí. Al exponer el panel a un rayo láser de alrededor de 10.000 nm, descubrieron que la eficiencia de convertir la luz en energía supera el 40%. ¿Y la tensión? Más de 7V. Números que pueden parecer abstractos para algunos de ustedes, pero créanme, son una gran noticia.
Sí, pero ¿de qué sirve?
Bueno, ahora que entendemos la ciencia detrás de esto, vayamos al grano. ¿Para qué es todo esto? El entusiasmo del equipo es palpable. Imagínese poder transferir 25 W de potencia a un módulo de tan solo 10 cm^2 con un láser de 12 kW a un kilómetro de distancia.
El potencial es inmenso. Estamos hablando de transmisión inalámbrica de datos en entornos particulares o de alimentación y carga de implantes médicos. El potencial de esta tecnología es inmenso y estamos ansiosos por ver adónde nos lleva.
La ciencia ficción se está convirtiendo en realidad ante nuestros ojos.