cerebroq, una startup israelí en el campo de la tecnología médica, ha desarrollado una plataforma terapéutica revolucionaria para tratar a las víctimas de accidentes cerebrovasculares.
El nuevo tratamiento utiliza "ondas cerebrales artificiales" a través de un dispositivo portátil que, según estudios clínicos, ha resultado 77% de los sujetos se recuperan más rápido de los accidentes cerebrovasculares en comparación con aquellos que no han experimentado el tratamiento.
Las "ondas cerebrales artificiales", transmitidas a través de la radiación electromagnética, estimulan el sistema nervioso para que vuelva a crecer y se cure a sí mismo.
En resumen: con este método, BrainQ pudo imitar los procesos de sincronización de la red neuronal humana.
El estudio
Los resultados del ensayo son muy alentadores y se presentarán como parte de la Conferencia Internacional sobre Accidentes Cerebrovasculares entre el 17 y el 19 de marzo.
La investigación doble ciego involucró a 25 sujetos. Después de 8 semanas de tratamiento, el 77% de los sujetos que recibieron terapia BrainQ obtuvieron puntuaciones de 1 o 0 en la escala de Rankin modificada (mRS), el estándar de oro para medir la discapacidad después de un accidente cerebrovascular.
Esta puntuación se traduce en personas que no presentan síntomas o síntomas menores y no presentan una discapacidad significativa. Solo el 25% de los sujetos en el grupo de control lograron puntajes de 1 o menos. Y casi todos los pacientes, el 92%, mejoraron en 2 o más puntos de mRS.
No se registraron eventos adversos relacionados.
Resultados sorprendentes en la lucha contra el accidente cerebrovascular
Estos resultados piloto son sorprendentes: la terapia BrainQ sugiere un efecto beneficioso desde la etapa subaguda.
Las intervenciones actuales para el accidente cerebrovascular son efectivas solo en las pocas horas posteriores al accidente cerebrovascular y son aplicables a menos del 5-10% de los pacientes. Esta tecnología puede tener la capacidad de extender el tiempo que se puede administrar la terapia correctiva a semanas. Y puede aplicarse a una población de pacientes mucho mayor.
protector de jeffrey, director del programa de Neurología Vascular y Accidentes Cerebrovasculares Integrales de UCLA e investigador principal de este (y los próximos) ensayos de BrainQ.
Ondas cerebrales artificiales contra el accidente cerebrovascular
La terapia de apoplejía BrainQ utiliza algoritmos de aprendizaje automático para extraer conocimientos biológicos de las ondas cerebrales, que se utilizan para imitar los procesos de sincronización natural de la red neuronal.
La terapia se administra a un paciente a través de un dispositivo portátil conectado a la nube que transmite campos electromagnéticos de baja intensidad sintonizados en frecuencia, lo que facilita los procesos de neuroplasticidad dentro del sistema nervioso central.
La start-up israelí BrainQ tiene como objetivo transformar la vida de millones de personas.
La suya puede convertirse en la principal solución neuroterapéutica en el hogar y es un buen augurio para un futuro de recuperaciones más rápidas y completas de los accidentes cerebrovasculares.