El agua es un recurso precioso y cada vez más escaso, pero los métodos actuales de desalinización a menudo contribuyen al problema del cambio climático debido a su alto consumo de energía de combustibles fósiles. Tecnologías Oneka ha encontrado una solución innovadora a este dilema: boyas modulares que aprovechan el movimiento de las olas para alimentar plantas desaladoras a bordo, produciendo agua dulce sin emisiones de gases de efecto invernadero.
Esta tecnología revolucionaria podría cambiar la cara de desalinización, haciéndolo más sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
La paradoja de la desalinización
¿Ironía del destino? A medida que la desalinización se vuelve cada vez más necesaria debido al cambio climático y la imprevisibilidad de las condiciones climáticas, la propia industria contribuye al calentamiento global. ¿La razón? Las altas necesidades energéticas de las plantas, lo que se traduce en un mayor uso de combustibles fósiles. Es un círculo vicioso que parece imposible de romper... ¿o tal vez no?
Estas boyas modulares que aprovechan el movimiento de las olas para alimentar plantas desalinizadoras a bordo producen agua dulce sin emitir un solo gramo de gases de efecto invernadero. Y eso no es todo: el sistema sólo descarga salmuera ecológica con un bajo contenido en sal. ligeramente superior a la del agua de mar, por lo que su impacto sobre la flora y la fauna marinas es absolutamente insignificante. Brillante, ¿no?
Agua dulce para todas tus necesidades
Si cree que se trata de un proyecto piloto o prospectivo, está equivocado. Oneka está orientada al supermercado, hasta el punto de que ha diseñado boyas de diferentes tamaños para satisfacer una amplia gama de necesidades.
Il Glaciar, actualmente en desarrollo, producirá hasta 500 metros cúbicos de agua dulce al día para municipios y grandes industrias costeras. yoIceberg puede producir 50 metros cúbicos por día para proyectos a escala comercial. Y para las intervenciones humanitarias y de socorro en caso de desastres naturales, existe laicecube, con una capacidad de producción de 1 metro cúbico de agua dulce al día. Hay para todos los gustos.
Un futuro más verde gracias a las inversiones azules
En el otoño de 2023, Oneka anunció el cierre de un préstamo desde 12,5 millones de dólares canadienses (aproximadamente 8,5 millones de euros). Marie-Cécile Cléroux, coordinadora de marketing y comunicaciones, dice que la empresa se centra en desplegar las boyas en nuevas regiones y ampliar sus operaciones para satisfacer la creciente demanda de soluciones sostenibles para el agua dulce.
Aprovechando el poder de las olas, estas boyas de desalinización están trazando un nuevo rumbo hacia un futuro en el que abundará el agua dulce y se minimizará el impacto ambiental. Por lo que parece, el futuro de la desalinización promete ser lleno de acontecimientos… en el mejor sentido de la palabra.