¿Qué tienen en común la música y el azúcar, además del popular artista de Reggio Emilia? No dije nada. Es decir: decía. Gracias a una startup visionaria llamada Evolución de la música, estos dos mundos tan distantes están a punto de cruzarse en un proyecto tan innovador como sorprendente. ¿Como? Con registros Evovinilo, los primeros vinilos ecológicos y sostenibles elaborados a partir de bioplásticos obtenidos a partir de residuos de caña de azúcar.
Es interesante recuperar la magia atemporal del vinilo y al mismo tiempo reducir el impacto medioambiental de la industria discográfica. ¿Listo para descubrir cómo un humilde residuo agrícola puede convertirse en la clave de un nuevo capítulo en la historia de la música?
De la plantación al plato giratorio
Una extensión de caña de azúcar se mece con el viento, bajo el cálido sol tropical. Un paisaje de postal, pero es sólo el comienzo del viaje que nos llevará directamente al corazón de una colección de vinilos completamente nueva.
De hecho, los residuos de estas plantaciones son la materia prima de la que nace Evovinyl. Un material bioplástico que es el resultado de una visión audaz y un minucioso trabajo de investigación y desarrollo. Porque los chicos de Evolution Music no estaban satisfechos con encontrar una fuente renovable para su vinilo. Querían crear un producto que estuviera a la altura de las expectativas de los audiófilos más exigentes.
Menos energía, más calidad
Los resultados, al parecer, fueron sorprendentes. Piensa en imprimir un Evovinyl lleva un 50% menos de tiempo en comparación con el vinilo tradicional. Y durante el juicio Ahorras hasta un 30% de energía. Nada mal, para un disco que promete hacer soñar a tus oídos.
Pero no se trata sólo de una cuestión de eficiencia de la producción. Evovinyl, gracias a sus propiedades antiestáticas intrínsecas, garantiza una calidad de sonido cristalina y duradera. Adiós silbidos, crujidos y otras imperfecciones. Con este vinilo la música brilla en toda su pureza.
Las pruebas confirmaron que Evovinyl no tiene nada que envidiar a los mejores vinilos que existen. De hecho, para ser honesto, los supera.
Vinilos “Sugar”: qué gran impacto
Cada año se venden alrededor de 41 millones de discos de vinilo en todo el mundo. No como en los años dorados, pero bueno, ¿habrías pensado que todavía quedaban tantos? Una buena cifra, que sin embargo esconde un inconveniente insostenible. Sí, porque para producir un solo LP Se necesitan aproximadamente 135 gramos de PVC., un material plástico derivado del petróleo que no es precisamente el mejor para la salud del planeta.
Hagamos las matemáticas: Para imprimir 5 millones de discos de vinilo se necesitan más de 1000 toneladas de PVC. Una enormidad, que se traduce en una huella de carbono que hace que el pelo de Ligabue vuelva a ser negro.
Con Evovinyl, sin embargo, la música cambia. Y no sólo en sentido figurado. Gracias a su fórmula a base de caña de azúcar, este innovador vinilo también reduce en un 30% las emisiones de CO2 relacionadas con la producción.
Del lado del reciclaje
Las buenas noticias no terminan ahí. Evovinyl no es sólo un vinilo con bajo impacto ambiental durante su producción. Es también un vinilo que, una vez agotada su tarea de difundir la buena música, puede reciclarse fácilmente y transformarse en nueva materia prima.
No más vinilos apilados en el ático o abandonados en los vertederos. Con Evovinyl, el círculo de la sostenibilidad se cierra de forma virtuosa. De la caña al tocadiscos, del tocadiscos al recogida de residuos, para luego renacer quizás en forma de otro vinilo, o quién sabe, de un objeto completamente diferente.
Un enfoque circular y regenerativo, que ve los residuos como un recurso y la música como un vehículo para un cambio positivo.
Los vinilos buenos, viejos y nuevos. Regreso al futuro
Por supuesto, todavía queda un largo camino por recorrer antes de que Evovinyl se convierta en el estándar de la industria. los chicos de Evolución de la música lo saben bien y no se escudan en un entusiasmo fácil. Todavía queda mucho trabajo por hacer para perfeccionar la fórmula, probar su durabilidad en el tiempo y convencer a productores y consumidores de abrazar esta revolución verde.
Sin embargo, la dirección es clara y el objetivo está más claro que nunca en el horizonte. Un futuro en el que la música no sólo será un placer para los oídos, sino también un gesto de amor por el planeta. ¿Estás listo para reproducir tu música favorita en un Evovinyl?
No puedo esperar a escuchar cómo suena el futuro.