Un avance potencialmente histórico en la lucha contra el cáncer: Moderna, en colaboración con Merck, ya casi ha llegado con su vacuna de ARNm contra el melanoma. Los resultados preliminares indican una reducción significativa del riesgo de recurrencia y muerte entre los pacientes con esta grave forma de cáncer de piel. Usando un enfoque similar a su vacuna COVID-19, la nueva vacuna ARNm-4157 (V940) está mostrando resultados prometedores en la reducción de la tasa de mortalidad y la propagación del cáncer.
¿Qué es el melanoma y por qué es tan grave?
El melanoma es una forma de cáncer que se desarrolla a partir de células de la piel que producen melanina, el pigmento que da color a la piel. Se sabe que es más grave que otros tipos de cáncer de piel porque tiende a propagarse (hacer metástasis) a otras partes del cuerpo si no se trata a tiempo. Sus causas son variadas, incluida la exposición excesiva a los rayos ultravioleta del sol, y su incidencia está aumentando en todo el mundo.
La tecnología de las vacunas de ARNm.
Para entender cómo funciona esta vacuna, primero debemos entender qué son las vacunas de ARNm y cómo funcionan. Las vacunas de ARNm son un nuevo tipo de vacuna. En lugar de introducir un patógeno inactivado o parte de él en el cuerpo (como en las vacunas tradicionales), las vacunas de ARNm proporcionan a las células del cuerpo instrucciones para producir una proteína específica del patógeno, en este caso el tumor, estimulando así una respuesta inmune.
¿Cómo funciona la vacuna contra el melanoma mRNA-4157 (V940)?
La vacuna ARNm-4157 (V940) de Moderna y Merck funciona introduciendo un trozo de ARNm sintético en el cuerpo que codifica 34 neoantígenos, que son proteínas únicas presente sólo en las células cancerosas. Una vez que las células del cuerpo comienzan a producir estos neoantígenos, el sistema inmunológico los reconoce como extraños y comienza a producir una respuesta inmune contra ellos.
La importancia de la "personalización" de la vacuna contra el melanoma
Una característica clave de esta vacuna es su “personalización”. Cada tumor tiene un perfil mutacional único en el ADN de sus células. Por ello, la vacuna se personaliza para cada paciente, en función del perfil genético de su tumor, maximizando así la eficacia del tratamiento. Merck y Moderna han comenzado uno ensayo de fase 3 en el que participarán aproximadamente 1.000 personas con melanoma en estadio IV. Los resultados definitivos se esperan para 2028, pero se espera que esta fase sirva principalmente para confirmar los resultados obtenidos hasta ahora. Mientras se esperan más datos, Moderna ya está trabajando para obtener la aprobación condicional de la vacuna, prevista para 2025.
Si bien el camino hacia la aprobación y el uso generalizado sigue siendo largo, los resultados hasta ahora ofrecen esperanza y demuestran el potencial revolucionario de las vacunas de ARNm en el tratamiento del cáncer. Esperando que su proceso de aprobación sea lo más transparente posible y no genere divisiones.