El terremoto que acaba de azotar Japón, de magnitud 7.5, ha vuelto a poner a prueba la preparación del país del Sol Naciente ante las catástrofes naturales. Con un presupuesto provisional Con 73 víctimas, Japón ha demostrado una vez más cómo un enfoque proactivo para gestionar la actividad sísmica puede marcar la diferencia en términos de vidas salvadas.
En la Universidad Northwestern, en Estados Unidos, el profesor daniel aldrich estudia la relación entre las inversiones en tecnología antisísmica y las muertes por terremotos. Si quieres aprender más, la investigación está aquí, pero ¿puedo estropearlo? Las inversiones en esta dirección son ahorros. Son bendiciones. Son vidas e infraestructuras salvadas, salvadas. Y si te parece obvio, pregúntate aún más por qué otros países no hacen lo mismo.
Exploremos juntos cómo los japoneses lograron reducir significativamente el impacto devastador de este terremoto, uno de los peores en cien años, mediante tecnología sísmica avanzada y sistemas de alerta temprana.
La evolución de las estructuras.
La capacidad de Japón para mitigar los efectos de los terremotos se debe en gran medida a su propia arquitectura innovadora. Durante los últimos 60 años los japoneses han desarrollado edificios llenos de virtudes. Edificios con cimientos diseñados para balancearse en respuesta a vibraciones sísmicas, en lugar de colapsar.
Esta tecnología antisísmica, que permite que los edificios se “flexionen” en lugar de “romperse”, ha salvado innumerables vidas. Protegió a las personas dentro de las estructuras durante los terremotos más violentos.
La cultura de preparación ante la actividad sísmica
En Japón, la preparación para terremotos es una parte integral de la vida diaria. Desde temprana edad, los estudiantes participan en simulacros de terremotos, aprendiendo cómo actuar en caso de emergencia. Esta formación continúa hasta la vida adulta, educándose a la población en el uso de equipos de extinción de incendios y técnicas de primeros auxilios.
Preparación profunda y concreta, que ayude a la población, en caso de terremoto, a responder de manera eficaz y organizada. Y podría marcar una gran diferencia en zonas como Campi Flegrei, o Vesubio.
Ojos siempre abiertos
Japón ha implementado sofisticados sistemas de alerta temprana que pueden advertir a la población de un terremoto inminente. Estos sistemas, capaces de avisar aproximadamente 30 segundos antes de la llegada de las ondas sísmicas, son esenciales para permitir a las personas llegar a un lugar seguro y activar automáticamente las medidas de seguridad en infraestructuras críticas.
¿Cómo funciona?
El sistema japonés que advierte a la gente de un terremoto 30 segundos antes de que ocurra se llama Alerta Temprana de Terremotos (EEW). Lanzado en octubre de 2007 por la Agencia Meteorológica de Japón (JMA), proporciona avisos oportunos tan pronto como comienza un terremoto, dando a las personas preciosos segundos para protegerse antes de que lleguen fuertes temblores.
30 segundos no es tan poco y es un gran logro. La comparación con otros países afectados por terremotos de magnitud similar pone de relieve la eficacia de las medidas japonesas. Países como Siria, Turquía y Pakistán han registrado decenas de miles de víctimas tras terremotos de menor magnitud. Japón ha mantenido un número relativamente bajo de víctimas, a pesar de la mayor intensidad de los terremotos (incluso los 9.0 que produjo en 2011 el accidente nuclear de fukushima).
Las figuras desnudas
Los terremotos de magnitud 7,8 del año pasado en Siria y Türkiye tuvieron un número de muertos de 41.000. Un terremoto de magnitud 7,6 en Pakistán en 2005 mató al menos a 86.000 personas. Incluso el aterrador terremoto de 2011 en Japón, que mató a unas 20.000 personas, provocó muchas menos víctimas que estos otros desastres.
A pesar de su historial en la mitigación de los impactos de los terremotos, Japón continúa buscando formas de mejorar su resiliencia. Este último terremoto devastador brindará la oportunidad de seguir reflexionando e innovando en materia de seguridad sísmica.
¿Qué podemos aprender?
La transposición de las estrategias japonesas de gestión sísmica en Italia se puede lograr mediante medidas concretas que abarquen diferentes aspectos de la prevención y el riesgo sísmico:
1. Construyendo Innovación: Italia puede beneficiarse de la adopción de tecnologías japonesas en la construcción de edificios a prueba de terremotos. Incluir estándares avanzados de ingeniería para la flexibilidad estructural en las normas de construcción italianas (hoy en día hay vanguardias todavía en progreso, como el Directrices ENERGÉTICAS, en colaboración con la región del Lacio) podría reducir el riesgo de derrumbes durante los terremotos.
2. Sistemas de Alerta Temprana: La implementación de sistemas de alerta temprana en Italia, similares a los que se utilizan en Japón, proporcionaría una alerta vital en caso de un terremoto. Esto requiere una inversión en infraestructura tecnológica y la difusión generalizada de información.
3. Educación y Capacitación: La integración de programas de formación sobre el comportamiento a adoptar en caso de terremoto, similares a los de Japón, en las escuelas, empresas y comunidades italianas aumentaría la concienciación y la preparación de la población.
4. Planificación Urbana: La adopción de un enfoque riguroso de planificación urbana, inspirado en el modelo japonés, que incluye normas antisísmicas rigurosas para las nuevas construcciones, podría reducir significativamente los riesgos en zonas de alta sismicidad.
5. Cultura de Preparación: Promover una cultura de prevención y responsabilidad colectiva, como en Japón, ayudaría a los italianos a comprender la importancia de la preparación personal y colectiva para los terremotos.
La adopción de estas estrategias en Italia no sólo reduciría los daños y las víctimas en caso de terremotos, sino que también conduciría a una mayor resiliencia nacional ante estos inevitables fenómenos naturales.
Japón, tecnología sísmica e inteligencia
El caso de Japón demuestra que, si bien no podemos prevenir los desastres naturales, podemos reducir significativamente sus consecuencias mortales mediante la innovación tecnológica y la preparación cultural.
El vínculo entre tecnología y humanidad nunca ha sido más evidente. Está en la acción antisísmica de Japón. Es la técnica que abraza a la humanidad, salvando vidas en tiempos de necesidad.