Cuando la OCDE anunció un acuerdo histórico Por un impuesto corporativo global del 15%, el entusiasmo era palpable: ¡por fin, un baluarte contra la evasión fiscal multinacional! El nuevo informe deObservatorio fiscal de la UE arroja una luz mucho menos halagadora sobre esta iniciativa. Resulta que los ingresos fiscales reales serán sólo una fracción de los esperados, gracias a una serie de lagunas que hacen que el acuerdo sea menos efectivo de lo esperado.
El contexto
El acuerdo, mediado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), tenía como objetivo poner fin a las maniobras contables y legales utilizadas por multinacionales como Apple y Nike para trasladar sus ganancias a paraísos fiscales como las Bermudas y las Islas Caimán. Islas. Estas maniobras provocan una pérdida de ingresos fiscales estimada entre 100 y 240 mil millones de dólares al año: según el informe del Observatorio Fiscal de la UE, se esperaba que el acuerdo generara ingresos equivalentes a casi el 10% de los ingresos fiscales totales de las empresas a nivel mundial. En cambio, debido a las lagunas introducidas durante el desarrollo del acuerdo, se espera que genere menos de la mitad de esa cantidad.
Las lagunas
Una de las rutas de escape más importantes involucra a empresas con activos tangibles, como fábricas y almacenes, en un país en particular. Estas empresas podrán seguir pagando un tipo impositivo inferior al 15%. Otra estrategia para eludir este impuesto permite a los países ofrecer créditos fiscales para determinadas actividades. Por ejemplo, aquellos como investigación y desarrollo. Y esto reduce aún más el tipo impositivo efectivo de las empresas. Estas lagunas jurídicas no sólo reducen los ingresos fiscales, sino que también podrían incentivar a las empresas a trasladar la producción a países con tasas impositivas inferiores al 15%. Además, la prisa de los gobiernos por ofrecer exenciones fiscales para las tecnologías verdes podría tener el mismo efecto que vaciar las arcas públicas, según el Observatorio Fiscal de la UE.
Impuesto global: ¿una catástrofe?
A pesar de estas críticas, el acuerdo sobre este impuesto sigue representando un paso adelante en la lucha contra la elusión fiscal global. Por ejemplo, la OCDE introdujo un intercambio automático de información entre autoridades tributarias en 2017, lo que ha dado resultados significativos en la lucha contra la evasión fiscal. El impuesto corporativo global es un paso en la dirección correcta, pero está lejos de ser la solución final. Es vital que los detalles del acuerdo se revisen y fortalezcan para garantizar que logre los objetivos previstos. Sólo entonces podremos decir que hemos logrado avances reales en la lucha contra la evasión fiscal global.
Mientras tanto, el organismo de control fiscal de la UE está pidiendo un impuesto global del 2% sobre la riqueza de los multimillonarios, una propuesta que recaudaría 250 millones de dólares al año de menos de 3.000 personas. ¿Podrá conseguir este dinero? ya veremos