Un equipo de investigadores de Penn State ha desarrollado un parche que, cuando se coloca suavemente sobre la piel, estudia la composición de nuestro sudor en tiempo real para controlar los niveles de glucosa y proporcionar datos valiosos que podrían ser vitales, especialmente para los diabéticos.
El punto de apoyo del sistema (ya me imagino algunos comentarios en las redes sociales) es un material llamado LIG, grafeno inducido por láser (¡Ese es él!), combinado con una malla 3D dorada y plateada. Juntos crean un sensor capaz de leer con precisión la química de nuestro sudor y enviar datos a un dispositivo conectado, para monitorear nuestra salud gota a gota (despues de las lagrimas).
El desafío del sudor
Aunque es una valiosa fuente de información, el sudor es un auténtico "cañón suelto": cambia su composición con nuestra dieta, el ejercicio físico e incluso con las condiciones ambientales. Los sensores anteriores fallaban ante estas variables, ofreciendo una lectura distorsionada o simplemente perdiendo el rumbo en este mar de variables.
El nuevo sensor recién desarrollado mejora la conductividad y la resistencia a la oxidación y aglomeración del material: una base sólida que ha permitido a los investigadores construir un sensor robusto y sensible, capaz de superar a los anteriores.
Monitoreo en tiempo real
El parche es un pequeño laboratorio que vive en nuestra piel. Puede medir los niveles de glucosa en el sudor detectando la oxidación de la glucosa en su superficie. Este proceso genera un cambio de corriente o potencial proporcional a la concentración de glucosa.
Eso no es todo: el parche también puede evaluar niveles de pH en el sudor al detectar iones de hidrógeno en la solución, e en, a través de otro sensor basado en LIG. En otras palabras: un flujo continuo de información sobre nuestra salud.


Más allá de la glucosa
El objetivo inicial de los investigadores es, por supuesto, ofrecer la solución para el diagnóstico precoz y el tratamiento eficaz de enfermedades como la diabetes de forma continua y no invasiva. Y también "de larga duración": el parche sensor de sudor puede medir los niveles de glucosa durante hasta tres semanas con alta sensibilidad y estabilidad, sentando las bases para un futuro en el que el control de la diabetes será cada vez más sencillo.
Huanyu “Larry” Cheng, autor principal del estudio (que te enlazo aquí) y profesor asociado de ciencias de la ingeniería y mecánica en Penn State, ve un futuro en el que el parche podría extenderse para detectar otros biomarcadores en el sudor. Hormonas, electrolitos, metabolitos: podrían revelar información sobre diversos aspectos de la salud como el estrés, la hidratación, la nutrición y el metabolismo de una forma nunca tan precisa.
La salud literalmente al alcance de tu mano, o mejor dicho, en la superficie de tu piel.