California tiene el potencial de generar suficiente electricidad para abastecer a 270.000 hogares simplemente instalando paneles solares en espacios vacíos junto a las autopistas, y en sólo tres condados del sur.
Esta es la conclusión de un nuevo informe publicado ayer. Estos espacios, actualmente en desuso y no aptos para la vida silvestre debido al intenso tráfico, reciben abundante exposición al sol, particularmente en la región del sur de California. El informe destaca no sólo los beneficios medioambientales, sino también las potenciales oportunidades económicas derivadas de la explotación de estas zonas.
Carreteras del sol
Los espacios no utilizados entre las carreteras, a menudo considerados "espacios muertos", presentan una oportunidad sin explotar para la generación de energía solar. Cada cruce de carreteras y cada salida ofrece espacios que pueden ser aprovechados para este fin.
En el informe de California, un examen detallado de las posibles áreas de instalación condujo a una estimación general de casi un gigavatio de energía solar derivada únicamente de estos espacios vacíos.
Una ventaja importante de estas zonas es su proximidad a las líneas de transmisión de electricidad y el hecho de que son de propiedad estatal. Esto facilita el desarrollo de grandes proyectos solares, eliminando la necesidad de contratar o arrendar terrenos a múltiples propietarios, construir nuevas líneas de transmisión o lidiar con otras complejidades logísticas.

¿Es un modelo "exportable"?
Si bien el análisis se centró en un estado como California (que tiene muchas otras áreas con alto potencial solar), el enfoque no es exclusivo de esas partes.
En 2021, la Administración Federal de Carreteras (el equivalente de nuestra Compañía de Carreteras) sugirió que otros estados también pueden adoptar esta estrategia. La administración Biden ve esta iniciativa como un "cambio de juego" para lograr los objetivos ecológicos de Estados Unidos. ¿Podemos hacerlo nosotros también? Teniendo en cuenta la exposición al sol europea, y en particular la italiana, diría que sí: han pasado diez años esa investigación crea mapas y modelos de una red global de energías alternativas.
Más allá de las carreteras
Obviamente, las carreteras no son el único lugar donde los paneles solares pueden marcar la diferencia. Otro estudio demostró que 5 millones de hogares podrían recibir energía instalando paneles solares en los techos de los almacenes. Esto transformaría espacios que de otro modo no se utilizarían en potentes generadores de energía, sin necesidad de despejar terreno adicional para plantas de energía solar. Si se consideran también los aparcamientos y los grandes almacenes, el impacto en la reducción de emisiones sería significativo.
En resumen: ¿por qué no? Las carreteras, que alguna vez fueron un símbolo de consumo y contaminación, podrían convertirse en las arterias de un nuevo mundo impulsado por el sol.