púlsar fusión, una empresa especializada en propulsión espacial, ha comenzado la construcción de lo que afirma es el motor de fusión nuclear práctico más grande de la historia. Este gigante tecnológico podría alcanzar velocidades de escape superiores a los 800.000 km/h. Sí, has acertado, estamos hablando de velocidades que superan con creces las de nuestros cohetes actuales.
Un viaje interplanetario en un abrir y cerrar de ojos
La revolucionaria tecnología de motores de fusión nuclear podría reducir drásticamente los tiempos de tránsito a Marte, Júpiter, Saturno e incluso más allá del sistema solar. Por ejemplo, existe un creciente interés en la posibilidad de la vida en Titán, una de las lunas de Saturno. Con el sistema de propulsión impulsado por fusión nuclear de Pulsar Fusion, el viaje podría realizarse en dos años en lugar de décadas.
Eso no es todo: la empresa afirma que esta tecnología podría impulsar una nave espacial con una masa de unos 1.000 kg hacia Plutón en sólo 4 años.
La humanidad tiene una enorme necesidad de una propulsión más rápida en nuestra creciente economía espacial, y la fusión ofrece 1.000 veces la potencia de los propulsores de iones convencionales que se utilizan actualmente en órbita.
En resumen, si los humanos logran la fusión nuclear para obtener energía, el motor de fusión nuclear en el espacio será obvio e inevitable. Bueno: creemos que la propulsión por fusión se demostrará en el espacio décadas antes de que podamos aprovechar la fusión para obtener energía en la Tierra.
Richard Dinan, fundador y director ejecutivo de Pulsar Fusion.
Un motor nuclear que hace más que empujar
El nuevo motor nuclear de fusión directa (DFD) de Pulsar Fusion podría proporcionar empuje y energía eléctrica a las naves espaciales. El motor del cohete alcanzaría temperaturas de varios cientos de millones de grados, creando un ambiente más caliente que el Sol. Los motores DFD son ideales para los viajes espaciales ya que la energía producida sería limpia, prácticamente ilimitada, y el motor nuclear sería relativamente compacto.
La compañía el esta trabajando en el motor en una instalación de prueba en Bletchley, Inglaterra. Los motores DFD pueden producir empuje sin la necesidad de un paso intermedio de generación de electricidad. En un sistema DFD, el reactor de fusión genera energía, creando un plasma de partículas cargadas eléctricamente. Estas partículas energéticas se convierten en empuje mediante un campo magnético giratorio.
Los retos del motor de fusión nuclear
Después de las oportunidades, considere los obstáculos para un logro como el motor espacial nuclear. Primero, confinar el plasma de fusión supercaliente a un campo electromagnético es un gran desafío.
Para comprender mejor el comportamiento del plasma, Pulsar Fusion se está asociando con Princeton Satellite Systems (PSS), una empresa de investigación y desarrollo aeroespacial. La idea es aplicar inteligencia artificial y aprendizaje automático para estudiar datos del reactor inverso de campo de Princeton (PFRC-2).
Las simulaciones evaluarán el rendimiento del plasma de fusión nuclear para la propulsión cuando sale de un motor de cohete que emite partículas de escape a cientos de kilómetros por segundo.
Todavía estamos en el terreno teórico, pero la sensación es que la tecnología para pasar a la fase avanzada ya está ahí.
El futuro está a la vuelta de la esquina
Pulsar Fusion acaba de pasar a la fase 3, la producción de la unidad de prueba inicial. Se espera que las pruebas estáticas comiencen en 2024, seguidas de una demostración en órbita de la tecnología en 2027.
Si todo va según lo planeado, podríamos estar en el umbral de una nueva era de exploración espacial. Una era enteramente interestelar.