En lo profundo de las aguas de China, a 70 kilómetros de la costa, hay un gigante que desafía las convenciones de la energía eólica. hablamos contigo julio pasado de este mastodonte 219 metros de altura y equipado con dos cabezales giratorios: la turbina de doble cara OcéanoX Se encuentra ahora en plena fase operativa, y supone un notable salto adelante en la evolución de las energías renovables marinas. Es como si la propia naturaleza hubiera sugerido el diseño: dos rotores bailando en direcciones opuestas, maximizando cada ráfaga de viento.
La danza de los gigantes gemelos.
La historia de OceanX es la de dos cabezas que piensan mejor que una. la empresa china Energía inteligente Mingyang ha creado algo que recuerda un poco a la Hidra de la mitología antigua, pero en lugar de escupir fuego, esta criatura marina genera energía limpia. La estructura de doble cara tiene forma de V, y cada torre soporta una turbina. MiSE8.3-180.
La verdadera genialidad de este diseño está en los detalles. Las palas de los dos rotores giran en direcciones opuestas, como en una coreografía perfectamente orquestada. Este movimiento de oposición no sólo es un espectáculo fascinante de ver, sino aumenta la eficiencia de generación de energía en un 4,29%. Las dimensiones son impresionantes: mientras que cada torre alcanza los 219 metros de altura, toda la estructura se extiende por 369 metros. Para que os hagáis una idea, es como tener la Torre Eiffel tumbada sobre el mar.
Cuando la forma sigue a la eficiencia
El secreto de esta turbina de doble cara reside en su forma elíptica alargada. No se trata sólo de una elección estética, sino de una precisa estrategia de ingeniería: las torres están diseñadas para captar el viento de cualquier dirección, gracias a su particular sección transversal. Esta característica permite que la plataforma se oriente automáticamente en la dirección óptima, como una veleta gigante. La estructura utiliza la presión del viento para girar más rápidamente en la mejor dirección, maximizando así la cantidad de energía que puede generar.
El sistema es completamente autónomo y puede empezar a utilizar su propia energía, una característica que lo hace particularmente resistente en condiciones difíciles.
Ingeniería de doble cara a prueba de tifones
El mayor desafío para una estructura de este tamaño es resistir la furia de los elementos. La plataforma ha sido equipada con un sistema de cables de "doble joroba" que garantiza estabilidad y seguridad incluso en las condiciones más extremas. Los cimientos flotantes están hechos de hormigón de alto rendimiento, mientras que un sistema de amarre adaptable de un solo punto permite que la estructura resista incluso los tifones más violentos. Es como si los ingenieros hubieran creado un malabarista marino capaz de mantener el equilibrio incluso durante una tormenta.
La turbina de doble cara ya está operativa en el parque eólico marino de Yangjiang Qingzhou IV, donde está demostrando todo su potencial. Es el resultado de la evolución de un prototipo desarrollado por Ingeniería Aerodyn y probado en Alemania, ahora llevado a su plena escala operativa. Con una capacidad combinada de 16,6 MW, la turbina de doble cara de OceanX demuestra que a veces, para innovar de verdad, hay que atreverse a pensar de forma innovadora.
O en este caso, pensar con dos cabezas en lugar de una.