¿Y si la forma en que una cámara web se parece a la nuestra?
Eyecam es un prototipo que explora el potencial futuro del diseño de dispositivos de detección. ¿De qué se trata? Básicamente es una cámara web con forma de ojo humano. Es horrible, chicos. Causa impresión, de hecho. Aparte de eso, nos mira, parpadea, mira a su alrededor y hace otras cosas que normalmente son prerrogativas del ojo humano.
Está bien. No es una cámara web, es una pesadilla.
¿Detectar las sensaciones que podemos tener ante la presencia de dispositivos "sensibles" que actúan en forma de webcam antropomórfica? Es el objetivo del estudio de Marc Teyssier, Marion Koelle, Paul Strohmeier y Bruno Fruchard e Jürgen Steimle. El equipo de la Universidad de Saarland en Alemania desarrolló este proyecto para hacernos reflexionar sobre la atención que prestamos a los dispositivos que nos rodean.
Los dispositivos de detección están en todas partes, hasta el punto en que no nos damos cuenta de su presencia. Aquí: esta webcam se destaca y cómo.
Todo sale del ojo
Contacto visual . Los ojos humanos son esenciales para la comunicación. A través de la mirada podemos percibir la felicidad, el enfado, el aburrimiento o el cansancio. Los ojos se mueven cuando alguien tiene curiosidad y entrecierra los ojos para mantenerse concentrado. Conocemos estas señales de interacción que influyen en nuestro comportamiento social.
Aunque las cámaras web comparten el mismo propósito que el ojo humano (el de ver) no son expresivos, no transmiten y transmiten afecto como lo hacen los ojos humanos. Eyecam informa los aspectos afectivos del ojo en una cámara web. ¿Cómo te hace sentir mirarlo?
Repensar nuestra relación con el mundo digital
El propósito de este proyecto es especular sobre el pasado, presente y futuro de la tecnología. Estamos rodeados de dispositivos de detección. La cámara de vigilancia que nos observa en la calle, los altavoces de Google o Alexa que nos responden (pero sobre todo ellos nos escuchan) o la webcam de nuestro portátil. Se están volviendo “invisibles”, se funden con nuestro día a día, hasta el punto de que no somos conscientes de su presencia. ¿Cuáles son, sin embargo, las implicaciones de su presencia en nuestro comportamiento?
Esta cámara web antropomórfica destaca los riesgos potenciales de ocultar las funciones del dispositivo y desafía el diseño de los dispositivos convencionales.
Esto (um, esta cámara web) parece real
El efecto de este prototipo es bastante espeluznante. Eyecam tiene un globo ocular activado con pupila, párpados y cejas para ver. Su movimiento replica el movimiento del ojo humano. El dispositivo consta de seis servomotores que replican el movimiento lateral y vertical del globo ocular, el movimiento de cierre de los párpados y el desplazamiento de la ceja. El control de estos motores se logra con un Arduino Nano. Se coloca una pequeña cámara dentro de la pupila y detecta una imagen de alta resolución. En resumen: es una especie de ojo, pero la computadora lo detecta como una cámara web plug-and-play normal.
¿Las conexiones mentales inmediatas de Gianluca? ExistenciaZ, La película de Cronenberg con la videoconsola hecha de carne, y por supuesto Black Mirror.
¿Cómo se comporta Eyecam?
Esta cámara web no solo está diseñada para parecer un ojo, sino también para actuar como un ojo. Como un ojo humano, Eyecam parpadea y los ajusta dinámicamente a los movimientos del globo ocular. Esta webcam puede ser autónoma y reaccionar por sí sola a estímulos externos, como la presencia de usuarios frente a "ella".
Y eso no es todo: en las intenciones de sus creadores, el dispositivo puede interpretar lo que está sucediendo en su entorno. Con sus algoritmos de visión por computadora, puede procesar el flujo de imágenes, encontrar características relevantes e interpretar lo que está sucediendo. ¿Conoces esta cara? ¿Debería seguirla? Etc.
Eyecam es inquietante, inusual, extraño. Genera especulaciones sobre la estética y funciones de los dispositivos.
No está mal para una cámara web, ¿verdad?
Eyecam permite reflexiones críticas sobre la funcionalidad de los dispositivos y su impacto en las relaciones humano-humano y humano-dispositivo. Esto abre un debate sobre las formas plausibles e inverosímiles en las que se podrían diseñar los dispositivos de detección en el futuro.
¿El dispositivo debe ser transparente e invisible para el usuario? ¿Cuál es el equilibrio entre mediación e intrusión? ¿Cómo se puede respetar la privacidad y mostrarle al usuario que está siendo observado? ¿Cómo podemos diseñar dispositivos inteligentes para que estén presentes donde sea necesario, pero respetuosamente ausentes cuando no?