Conseguir fuerza y elasticidad al mismo tiempo siempre ha sido un gran reto en la ingeniería de materiales. Ganar fuerza significa perder elasticidad y viceversa.
Hoy los investigadores de VTT y la Universidad de Aalto pueden haber resuelto el problema con un material biológico inspirado en la naturaleza.
El equipo lo creó fusionando fibras de celulosa y proteínas de seda. El resultado ha sido espectacular. Se obtuvo un material muy resistente y al mismo tiempo elástico, que en un futuro próximo se puede utilizar en prácticamente todos los campos de aplicación posibles e imaginables: industria textil, embalaje, aplicaciones médicas. (como sutura).
Según el profesor Markus Linder, uno de los autores de la investigación, la naturaleza ofrece muchos ingredientes para desarrollar materiales. La ventaja con ambos materiales utilizados en el caso específico (celulosa y seda) es que son biodegradables y no dañan la naturaleza.

100% orgánico
"Usamos pulpa de abedul, la dividimos en nanofibras y la alineamos en una especie de andamio rígido. Luego infiltramos la matriz de celulosa con el adhesivo de la tela de araña", dice. Pezhman Mohammadi de la VTT.
La seda es una proteína natural secretada por animales como los gusanos, y también se encuentra en las telas de araña. El siguiente paso dado por los investigadores de la Universidad de Aalto fue obtener esta seda de bacterias con ADN modificado.
"Nuestro trabajo muestra todo nuevos materiales, las nuevas y versátiles posibilidades que surgen de la ingeniería de proteínas. En el futuro podremos hacer compuestos similares con conjuntos de características específicas para cada tipo de uso".
Pezhman Mohammadi VTT.
La investigación fue publicada en la revista científica. Science Advances.
Una nueva clase de productos basados en este material biológico y completamente biodegradable puede reemplazar totalmente al plástico. Envolturas, vendas, tirantes, complementos de todo tipo. Ciertamente tendrán una duración más corta que la actual, pero esto es bueno.