En el mundo de la energía solar, incluso una mejora del 0,1% en la eficiencia se considera un logro significativo. Ahora imagina lo que eso significa. superar en un 1,15% lo que durante décadas se ha considerado un límite teórico insuperable. Eso es exactamente lo que hizo. Longi con su nueva célula fotovoltaica en tándem de silicio/perovskita. Una eficiencia de conversión del 34,85%, certificado por el prestigioso Laboratorio Nacional de Energías Renovables estadounidense, lo que representa no sólo un nuevo récord mundial, sino un auténtico punto de inflexión en la historia de la energía solar.
¿Cómo lo hicieron? La respuesta está en un cóctel de innovaciones que involucra fluoruro de litio, moléculas de diyoduro de etilendiaminomonio y una superficie de silicio con textura asimétrica. ¿Qué dices? ¿Es mejor hablar más “fácilmente”? Bueno. Vamos.
Longi, superar lo insuperable
El límite de Shockley Queisser El 33,7% se ha considerado durante décadas una barrera casi insuperable para las células solares de unión única. Este límite teórico, calculado en la década de 60, representaba el Santo Grial de la eficiencia fotovoltaica.
Longi hizo algo extraordinario: superó este límite en más de un punto porcentual. Quizás no parezca mucho, pero en el mundo de la energía solar, es como romper un récord mundial en los 100 metros por medio segundo. ¿Cómo lo hará? Combinando el silicio tradicional (que domina el 95% del mercado fotovoltaico) con minerales de perovskita.
La alquimia de los materiales
La clave del éxito de esta célula reside en una ingeniosa estructura en capas. Los investigadores de Longi mejoraron tanto el bloqueo de “huecos” (cargas positivas) como el transporte de electrones, utilizando capas delgadas de moléculas de fluoruro de litio (LiF) y diyoduro de etilendiaminomonio (EDAI).
Es un poco como construir una autopista perfecta para partículas eléctricas: las moléculas EDAI “cubren” las áreas que el LiF no puede cubrir, creando un sistema de transporte de energía prácticamente libre de obstáculos.
El equipo dijo que están a punto de lograr un mejor acoplamiento estructural, utilizando una tecnología que utiliza células de silicio de alta presión con una estructura de superficie asimétrica.
Lo que me parece más impresionante es cómo Longi ha resuelto uno de los problemas clásicos de células en tándem:la interfaz entre diferentes materiales. La superficie texturizada asimétrica de sus celdas de heterounión de silicio representa una solución elegante a un problema complejo.

Longi, una empresa que bate récords
No es la primera vez la compañía china aparece en los titulares por sus récords de eficiencia. Es como si esta empresa hubiera hecho de romper límites su marca registrada.
En noviembre de 2023, Longi había alcanzado una eficiencia del 33,9%. Luego, en junio de 2024, había aumentado al 34,6%. Ahora, con este 34,85%, demuestra que su trayectoria de innovación sigue apuntando hacia arriba.
Y no se trata sólo de células tándem. Este año, Longi estableció otro récord con una celda de silicio que utiliza tecnología HIBC (Heterojunction Interdigitated Back Contact), logrando una eficiencia del 27,81%, un resultado extraordinario para una celda de silicio monocristalino.
Implicaciones para el futuro de la energía solar
¿Qué significa todo esto para nosotros, simples mortales? Simple: paneles solares más eficientes significan más energía producida a partir de la misma cantidad de espacio, costos de energía potencialmente más bajos y una adopción más rápida de la energía solar.
Me gusta pensar que estamos en el comienzo de una nueva era para la energía fotovoltaica. Cuando empresas como Longi rompen límites teóricos que parecían insuperables, se abren posibilidades que antes ni siquiera podíamos imaginar.
Algún día recordaremos el límite Shockley-Queisser como una curiosidad histórica, un obstáculo que la ciencia y el ingenio humano han superado.