Entra en acción la segunda parte del llamado “Plan Velo”: París aumentará el número de carriles bici protegidos en la ciudad y aumentará las plazas de aparcamiento para bicicletas. Desde ahora hasta 2026 la capital francesa aspira a convertirse en una ciudad 100% ciclista.
La grandeza sobre dos ruedas
Plan Velo es el plan ciclista francés que arrancó con una dotación de unos 170 millones de euros: con sus diversas actualizaciones, en lugar de reducir su alcance, lo están ampliando, convirtiéndolo en uno de los proyectos más atrevidos del mundo en materia de ciclismo.
La ambición declarada (freno un pellizco y digo "deseo") es transformar París, no hace tanto tiempo una ciudad considerada tóxica para los ciudadanos en bicicleta, en una ciudad que es "100% en bicicleta (y en bicicleta)". El nuevo plan aporta otros 280 millones de euros: prevé la creación de instalaciones adicionales para ciclistas y un nuevo programa de mantenimiento completo para cada carril bici. Sobre todo, se enfatiza en el plan, la seguridad diaria de los recorridos, con toda la limpieza necesaria y remoción de obstáculos físicos o meteorológicos (alejar la nieve, como se hace hoy con las calzadas).
Liberté, égalité, stationnement
Entre los puntos fuertes del nuevo Plan Velo, la parte del león la constituyen las nuevas plazas de aparcamiento para bicicletas. Aumentarán notablemente, al mismo tiempo (y esto es noticia en las noticias) con las reducciones de plazas de aparcamiento para coches. Se construirán 30.000 más, con más de 1000 espacios reservados para bicicletas de carga también, para mejorar la entrega de bicicletas también.
La mejora también afectará a los nodos de intercambio: se construirán 40.000 nuevos aparcamientos vigilados cerca de las estaciones de ferrocarril, con una opción que, a través de subsidios y otros incentivos, también permitirá al sector privado agregar otros 50.000 espacios.
Ciudad 100% ciclo
Los esfuerzos de la capital francesa han sido gigantes. Ya ha traído más de 50 km más de carril bici, y tiene las ideas muy claras para convertirse en una ciudad verde de “20 minutos” en 15 años, en la que los ciudadanos puedan llegar a pie o en bicicleta a todos los servicios que necesiten.
Solo hay que tomar un ejemplo, en lo que a mí respecta: esta es la forma correcta de correr para llegar lejos.