Estás en la cima de una montaña y observas desde lo alto una inmensa extensión de nieve, glaciares eternos que reflejan la luz en mil reflejos de colores, mientras respiras profundamente el aire más puro y chispeante. Un momento tan mágico es demasiado bueno para ser verdad.
Y de hecho, tal vez no lo sea.
Al menos eso es lo que sucederá cuando finalice el proyecto de investigación de la Universidad de Berkeley.
Usa la luz para mostrarnos lo que no existe
Nuestras experiencias temporales producen un rastro en el cerebro: Las neuronas se iluminan en secuencia y transmiten sensaciones y reacciones a nuestro cuerpo. Los neurocientíficos están tratando de aplicar ingeniería inversa a estas experiencias para tratar de revivirlas simplemente estimulando a las neuronas para que "rehagan ese camino".
Hoy el proceso es bastante invasivo: las neuronas deben modificarse genéticamente con proteínas fotosensibles para que puedan manipularse haciéndolas reaccionar a la luz (es una ciencia emergente llamada optogenética). Para gestionarlo todo, es necesario implantar quirúrgicamente una placa metálica en la zona utilizada.
En cambio, el desafío consiste en estimular experiencias en el cerebro iluminando la superficie de la corteza como con un faro con la ayuda de hologramas luminosos que reproducen en 3D las vías neuronales que se van a replicar.
"La ventaja es poder controlar las neuronas de forma precisa y específica". explica Nicolás Pégard, uno de los autores del estudio publicado en Nature Neuroscience. “Este es un punto de encuentro de diferentes tecnologías, que nunca antes habíamos podido juntar”.
El resultado es un "modulador holográfico cerebral", un sistema optogenético llamado 3D-SHOT, presentado el año pasado con un artículo en la revista Nature Communications.
Que hace 3D-SHOT
El potencial del dispositivo es increíble, especialmente en el campo médico: para estimular la vista en los ciegos y el oído en los sordos, devolver algunas sensaciones a las personas con nervios periféricos dañados y ayudar a controlar aún mejor las extremidades robóticas.
“Leer y escribir las vías neuronales es un poco como hablar con el cerebro con su lenguaje y hacer que interprete los mensajes mucho mejor. Esto algún día nos llevará a desarrollar tecnologías que también pueden mejorar nuestros sentidos o agregar otros nuevos ".
pinitos
La etapa actual de la investigación consiste en probar el prototipo 3D Shot en las áreas visual, táctil y motora del cerebro de ratones.
El siguiente paso es entrenar a los ratones para que puedan observar el cambio de comportamiento debido a la estimulación: la observación del comportamiento es el único método posible, también porque no puedes pedirle directamente al ratón que te diga cómo es esa carrera en el volante que NO está haciendo en realidad, pero la sensación que le has transmitido en el cerebro.
Entonces habrá que configurar la precisión del dispositivo para actuar sobre zonas concretas del cerebro estimulando sensaciones precisas, y miniaturizar los componentes para conseguir meter el 3D Shot en una mochila (hoy prácticamente ocupa casi una habitación entera).
El siguiente paso son las pruebas en humanos, hasta que un día vivimos experiencias fantásticas totalmente inducidas en nuestro cerebro por una tecnología avanzada. Quizás ya está sucediendo y no lo sabemos, dirían Elon Musk y los científicos que creen que estamos viviendo en una simulación o en un universo "holográfico" completo.