¿Recuerdas la última vez que viste una obra de teatro en un idioma extranjero? Esa molesta sensación de perderse en los matices, los dobles sentidos, los chistes que hacen reír a todos menos a ti. Una molesta mezcla de frustración y aislamiento que puede arruinar incluso la actuación más brillante. Sin embargo, en Nueva York algo está cambiando: el teatro multilingüe ya no es una quimera.
Se llama “Crimen perfecto”, es el misterio teatral de más larga duración en la Gran Manzana y acaba de presentar un sistema de traducción simultánea impulsado por inteligencia artificial. Un experimento que abre el camino no sólo a la experiencia de los espectadores extranjeros, sino a todo el ecosistema teatral, en un momento en el que muchas producciones Off-Broadway luchan por llenar las salas.
La tecnología al servicio de la accesibilidad
El público que asista a “Perfect Crime” en el Theater Center podrá hacer algo antes impensable: escanear un código QR, seleccionar uno de los 60 idiomas y escuchar la traducción en tiempo real a través de auriculares mientras el espectáculo se desarrolla en el escenario.
El público tiene a su disposición árabe, afrikáans, polaco y decenas de idiomas más, y eso no es todo: el texto traducido también aparece en la pantalla del teléfono inteligente, una opción valiosa para quienes tienen dificultades auditivas o simplemente prefieren seguir este camino.
Dado que la mayoría de los espectadores de “Perfect Crime” son turistas que visitan Nueva York, entre 25 y 30 personas utilizan el servicio durante las ocho funciones semanales. Una cifra que, según catalina russell (director general del teatro y estrella del espectáculo), le permite vender entradas a personas que de otra manera nunca habrían considerado esa opción. Me sorprende especialmente el hecho de que los espectadores hayan elegido una amplia gama de opciones lingüísticas, sin que ninguna lengua predomine sobre las demás: se trata de teatro multilingüe en el verdadero sentido de la palabra.
Teatro multilingüe, una ventaja competitiva en la era pospandémica
Si bien los espectáculos de Broadway se han recuperado en gran medida de la crisis pandémica (durante la cual los teatros de Nueva York estuvieron cerrados durante 18 meses), las producciones Off-Broadway y los teatros regionales Siguen luchando en llenar teatros y generar ganancias. En este contexto, la innovación tecnológica no es una ilusión, sino un posible salvavidas.
“Mucha gente no va al teatro porque no es accesible”, dice Russell. “Si no entienden bien el inglés, ni siquiera lo consideran una opción”. Una consideración banal pero esclarecedora: durante años hemos dado por sentado que el teatro era una experiencia lingüísticamente exclusiva, y no sólo en los Estados Unidos. Y hemos relegado a los hablantes no nativos al papel de espectadores de segunda clase.
Russell también espera que el servicio de traducción le dé a su teatro multilingüe una ventaja sobre los musicales cercanos, que tienden a ser más populares que las obras de teatro. La tecnología de IA seguramente llegará a los musicales y a Broadway, dijo, pero llevará tiempo. "El Off-Broadway puede ser más ágil. Podemos hacer cosas que Broadway no puede", añadió con un dejo de orgullo.
Cómo funciona el teatro multilingüe
El teatro multilingüe funciona capturando las voces de los actores (que llevan micrófonos) y transfiriéndolas a través de un mezclador de audio a un ordenador conectado a la nube de una startup especializada en traducción de IA.
El sistema transcribe el audio en texto, lo traduce al idioma deseado utilizando una serie de modelos de IA (el modelo específico depende del idioma) y entrega el resultado a los usuarios en 3-5 segundos. En la práctica, es más rápido que tener un traductor simultáneo sentado a tu lado.
El debate sobre la calidad
Como ocurre con cualquier innovación, no faltan escépticos. Bliss Griffin, un consultor teatral radicado en Nueva York, plantea preocupaciones legítimas: los dramaturgos pasan mucho tiempo eligiendo palabras específicas, regionalismos y modismos, y parte de ese trabajo podría perderse en la traducción automática. “La traducción palabra por palabra que probablemente proporcione una máquina no es una experiencia inclusiva ni de alta calidad”, observó.
Ma Russell Sostiene que, si bien una traducción generada por IA puede no ser perfecta, la esencia del programa permanece. ¿Y no es éste el corazón de la experiencia teatral? Comprometerse un poco con la precisión lingüística para abrir las puertas del teatro a un público global podría ser un sacrificio aceptable, incluso noble, en una época en que el arte necesita desesperadamente nuevos públicos para sobrevivir.
En el fondo, el teatro multilingüe es sólo el último capítulo de la evolución milenaria de un arte que, para mantenerse vivo, siempre ha sabido reinventarse. Y esta vez lo hace hablando todos los idiomas del mundo.