“Alexa, enciende las luces. Roomba, ven a la sala de estar. Helix, por favor pon la mesa y prepara la cena.” Si estos intercambios le parecen surrealistas, está equivocado: podrían ser la nueva normalidad en un futuro no muy lejano, gracias al extraordinario progreso de lainteligencia artificial aplicado a Robótica doméstica. La última frontera en este campo se llama Hélice, un modelo de IA que puede transformar el robot casero en verdaderos factótums digitales, dispuestos a satisfacer todas nuestras necesidades.
Pero Helix no es el único protagonista de esta revolución. La startup noruega también 1X está trabajando duro para llevar robots humanoides a nuestros hogares. Su último prototipo, Nueva Gamma, fue presentado hace apenas unos días y promete ser aún más avanzado que su predecesor, Neo Beta. Imagina un robot que pueda preparar café, lavar la ropa y pasar la aspiradora, todo mientras tú te relajas en el sofá o haces otras tareas.
La revolución de los robots domésticos está llegando
Gracias a sistemas de aprendizaje innovadores que combinan comandos de voz, análisis visual e control fino de los movimientosEstos robots humanoides ahora pueden moverse con facilidad en entornos domésticos, reconocer y manipular objetos, e incluso coordinarse entre sí para realizar tareas complejas. Un hito extraordinario, que el modelo Helix consiguió en tan solo 500 horas de entrenamiento, y que abre escenarios tan apasionantes como inquietantes.
Piensa en la comodidad de contar con un ayudante incansable y siempre disponible, dispuesto a encargarse de las tareas más tediosas y repetitivas, liberando tiempo precioso para que lo dediques a lo que realmente importa. Se acabaron los montones de platos que lavar, las montañas de ropa que planchar o los suelos que limpiar: tu fiel robot doméstico se encargará de ello, con una precisión y una eficacia incomparables.
¿Cómo funciona el proceso de aprendizaje de los nuevos robots domésticos?
Figura combinó dos IA, S1 y S2, para crear el modelo Helix Vision-Language-Action. S2 Es el sistema de pensamiento de nivel superior que opera en una frecuencia más baja. Este modelo entenderá mis órdenes y también recibirá información visual de su entorno. Decirle al robot que recoja un vaso sería suficiente para que la IA entendiera que estaba manipulando un objeto frágil, incluso si nunca hubiera usado un vaso durante el entrenamiento.
S1 Es la IA que controla los movimientos robóticos de dedos, brazo y torso para ejecutar el comando analizado por S2. S1 opera a una frecuencia mucho más rápida que S2, lo que permite que el robot se adapte a escenarios de la vida real en tiempo real. Por ejemplo, quizás el robot necesita ajustar la posición de su torso mientras mueve un brazo para que sus dedos puedan alcanzar el vaso que necesita mover del lavavajillas a un cajón.
Desafíos y oportunidades de la coexistencia hombre-máquina
Pero ¿estamos realmente dispuestos a delegar una parte tan grande de nuestra vida diaria en un asistente artificial? ¿Y qué supondrá a largo plazo esta coexistencia “simbiótica” entre el hombre y la máquina? Si bien por un lado las ventajas parecen innegables (más tiempo libre, menos estrés, una casa siempre ordenada), por otro no faltan las cuestiones éticas y sociales.
¿Qué impacto tendrá esta tecnología en el mercado laboral? ¿Seremos testigos de una sustitución progresiva de las trabajadoras domésticas de carne y hueso por sus equivalentes robóticos? ¿Y cómo cambiará nuestra percepción de la intimidad y del espacio privado, con la presencia constante de una entidad artificial dentro de las paredes de nuestro hogar? Son preguntas para las que aún no hay una respuesta definitiva, pero una cosa es cierta: el avance de robots domesticos Es imparable y requerirá un replanteamiento profundo de la forma en que vivimos e interactuamos con la tecnología.
Un futuro para escribir juntos
Dependerá de nosotros, como sociedad, encontrar el equilibrio adecuado entre las indudables oportunidades que ofrecen estos ayudantes digitales y la necesidad de preservar nuestra humanidad y nuestros valores fundamentales.
Mientras tanto, empresas como Figura e 1X continúan ampliando los límites de lo posible, brindándonos una visión de un futuro cada vez más cercano en el que los robots domésticos ya no serán una curiosidad cinematográfica, sino una presencia tangible y familiar en nuestras vidas. Y tú, ¿estarías dispuesto a recibir a un Nueva Gamma o una Hélice ¿en tu sala de estar? ¿Qué tal si comenzamos a preparar el escenario, quizás empezando con un simple “Hola, soy tu nuevo compañero de habitación artificial”?