Tu corazón tiene un mensaje importante que comunicarte: ama la rutina. Un análisis en profundidad de más de 72.000 personas reveló que dormir con regularidad es fundamental para la salud cardiovascular. Los investigadores han descubierto que las personas que duermen de forma irregular tienen un riesgo significativamente mayor de desarrollar problemas del corazón. Es como si nuestro cuerpo fuera una orquesta sofisticada: cuando el director (el sueño) pierde el ritmo, toda la música se ve afectada. Y las consecuencias pueden ser graves.
El descubrimiento que lo cambia todo
Científicos deBiobanco del Reino Unido analizaron datos de 72.269 personas de entre 40 y 79 años, ninguno de los cuales tenía antecedentes de problemas cardiovasculares. Los resultados fueron sorprendentes: quienes duermen irregularmente tiene un 26% más de riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas. Me llama especialmente la atención cómo este estudio muestra que no es tanto la cantidad de sueño lo que marca la diferencia, sino su regularidad.
Cuando el sueño irregular se convierte en una cuestión de números
Los participantes usaron un dispositivo de seguimiento de actividad durante siete días. A partir de estos datos, los investigadores crearon un índice de regularidad del sueño (SRI) de 0 a 100. Aquellos con una puntuación superior a 87 siguieron un patrón regular, mientras que los inferiores a 72 mostraron hábitos irregulares. El seguimiento continuó durante ocho años, rastreando episodios de infarto, insuficiencia cardiaca e ictus.
La paradoja del sueño
Uno de los aspectos más interesantes que surgió del estudio, publicado en Revista de epidemiología y salud comunitaria (lo enlazo aqui), es que Incluso las personas que dormían el número "correcto" de horas (7-9 para adultos entre 18 y 64 años, 7-8 para los mayores de 65 años) pero de forma irregular, presentaban los mismos riesgos elevados. Es como si nuestro cuerpo prefiriera una rutina mediocre pero constante a una alternancia de periodos de sueño óptimos y malos.
No se puede subestimar la importancia de estos hallazgos. Los investigadores han considerado numerosos factores que podrían influir en la salud cardiovascular, desde fumar all'uso di farmaci, del consumo de café e alcohol a problemas de salud mental. La conclusión es clara: combatir el sueño a la intemperie debería convertirse en una prioridad en las directrices de salud pública. Nuestro corazón, después de todo, late a un ritmo regular: tal vez deberíamos tomar un ejemplo de ello.