Sabemos que la producción de energía eólica tiene varios problemas de fondo: entre ellos, el hecho de que las aspas giratorias demasiado grandes arruinan la armonía del paisaje y ponen en riesgo a las aves. Por este motivo, son muchas las soluciones que se están estudiando en todo el mundo (siempre intentamos seguir todo lo que podamos). Ahora, una startup francesa ha encontrado una solución original con una turbina eólica vertical llamada La Quinoa.
La Quinua tiene un diseño compacto e innovador, que promete generar energía limpia sin comprometer la biodiversidad. Echémosle un vistazo juntos: ¿te gusta?
Una nueva era para la energía eólica
La energía eólica en Europa vive un 2024 extraordinario, con un crecimiento exponencial que lleva a la producción desde los 5 TWh de enero hasta los casi 30 TWh previstos para diciembre. Esta impresionante tendencia marcó un momento histórico en la primera mitad del año, cuando la energía eólica, junto con la fotovoltaica, superó por primera vez a los combustibles fósiles en la producción de electricidad europea, alcanzando el 30% del mix eléctrico total.
La capacidad instalada alcanzó los 221 GW, de los cuales 201 GW terrestres y 20 GW marinos, sumando 6,4 GW de nuevos parques eólicos en los primeros seis meses del año. En septiembre, varios países registraron aumentos notables respecto al año anterior:
- Italia: +275%
- Alemania: +60%
- Portugal: +50%
- España: +29%
- Francia: +24%
Las perspectivas de futuro son igualmente prometedoras: la Unión Europea se ha fijado un objetivo ambicioso, El objetivo es que la energía eólica represente el 43% del consumo de electricidad para 2030. Los expertos de la industria predicen que Europa alcanzará los 112 GW de capacidad marina en 2030 y superará los 520 GW de instalaciones totales en 2040, consolidando su papel de liderazgo en la transición energética global. Sin embargo, detrás de estas impresionantes cifras se esconden cuestiones críticas que no podemos ignorar: lo visual. el impacto sobre el paisaje, el ruido constante y, sobre todo, los riesgos para la biodiversidad.
El aerogenerador vertical que cambia las reglas
Energía colaborativa ha desarrollado una solución innovadora que aborda estos problemas de frente. El aerogenerador vertical Quinoa representa un replanteamiento radical de la tecnología eólica. El corazón del sistema está formado por tres palas de material compuesto, de 6 metros de altura, que giran alrededor de un eje vertical.
Las dimensiones se han optimizado para maximizar la eficiencia y minimizar el impacto medioambiental: el rotor tiene un diámetro de sólo 3,5 metros y la altura total se limita a los 12 metros. Me llama especialmente la atención porque este diseño eliminar la necesidad de utilizar Tierras raras, haciendo más sostenible todo el ciclo productivo.
Aerogenerador vertical, interesante rendimiento
A pesar de su pequeño tamaño, la Quinua demuestra una notable capacidad de producción. Cada unidad, con una potencia nominal de 10 kW, Puede generar entre 5 y 52 MWh al año dependiendo de las condiciones del viento. La eficiencia aumenta exponencialmente en múltiples instalaciones: un parque de 100 turbinas, estratégicamente dispuestas en forma quincuncial o reticular, puede alcanzar una producción anual de entre 5.876 y 6.760 MWh con vientos de 14 m/s. La versatilidad del sistema también permite la integración con paneles fotovoltaicos y la producción de hidrógeno verde mediante electrólisis.
La empresa entra ahora en una fase crucial con la planificación de los primeros prototipos industriales. Ya está previsto un primer proyecto piloto en las Costas de Armor, donde esta tecnología innovadora demostrará su potencial para transformar el sector energético sobre el terreno.
El futuro es una mezcla.
La energía eólica está avanzando a pasos agigantados en toda Europa e innovaciones como la quinua demuestran que el sector está en crisis. Pero la verdadera fuerza de la transición energética reside precisamente en la diversificación de las fuentes: ninguna tecnología por sí sola puede satisfacer nuestras necesidades energéticas. La energía solar, eólica, hidroeléctrica y otras fuentes renovables están conformando un mix energético cada vez más rico y resiliente, que crece año tras año.
Un poco como este aerogenerador vertical: mira hacia arriba, hacia un futuro más sostenible, pero mantiene los pies firmemente plantados en la concreción de las soluciones ya disponibles. El camino está claro: el futuro de la energía será cada vez más limpio, diversificado y, si se me permite jugar con las palabras... vertical.