Telosa: nombre que deriva del griego y significa “el propósito más elevado”. Y nunca hubo un nombre más apropiado para describir uno. visión ambiciosa de las ciudades del futuro. En el corazón del desierto americano, Telosa se prepara para convertirse en un laboratorio vivo de sostenibilidad, equidad e innovación urbana, con el objetivo de albergar a 5 millones de habitantes en 2050.
Telosa, una utopía en el desierto
Imagine una metrópolis futurista surgiendo de la nada, como un espejismo en el desierto americano. Pero Telosa no es una ilusión óptica: es el sueño concreto de Marc Lore, ex presidente de Walmart y emprendedor visionario. Con una inversión prevista de 400 millones de dólares, Lore quiere transformar 12.000 hectáreas de terreno baldío en una ciudad modelo para el siglo XXI.
recientemente, la empresa El desarrollador de Telosa ha publicado nuevas representaciones del proyecto, que ofrecen una visión más detallada de esta visión futurista. Las imágenes muestran un paisaje urbano impresionante, con rascacielos futuristas, vastos espacios verdes y sistemas de transporte innovadores.
La búsqueda del terreno ideal
Actualmente, el equipo de Telosa se encuentra inmerso en la fase crucial de búsqueda del terreno ideal. Están evaluando varias ubicaciones en los Apalaches y el desierto occidental de Estados Unidos, buscando un área que pueda acomodar su ambiciosa visión.
La selección del sitio será fundamental para el éxito del proyecto, considerando factores como el acceso a los recursos hídricos, las condiciones climáticas y la proximidad a la infraestructura existente.
La ciudad de 15 minutos
Telosa está diseñada como una “ciudad de 15 minutos“, donde se puede llegar a todo lo necesario en un cuarto de hora a pie o en bicicleta. Adiós al tráfico congestionado y a la contaminación: los coches de combustibles fósiles serán sustituidos por vehículos eléctricos autónomos y un sistema futurista de teleférico urbano.
En el corazón de la filosofía de Telosa hay un principio llamado equitismo: un sistema económico en el que los ciudadanos tienen un interés directo en la propiedad de la tierra en la ciudad. "Si la ciudad prospera, los residentes también prosperan", explica Lore. Es un intento audaz de crear una forma de capitalismo más equitativa e inclusiva. Tal vez.
Telosa, tecnología al servicio de la comunidad
La automatización jugará un papel clave en Telosa. Desde vehículos sin conductor hasta drones de reparto, la tecnología estará en todas partes, pero siempre con el objetivo de mejorar la vida de los ciudadanos. La torre del equitismo, el rascacielos símbolo de la ciudad, será una concentración de innovaciones ecosostenibles.
Los primeros 50.000 habitantes no se mudarán antes de 2030, también porque, por el momento, el sueño de Telosa todavía está tomando forma concreta. En un mundo que enfrenta crisis climáticas y una creciente desigualdad, esta ciudad del futuro ofrece una visión audaz de lo que podría ser. Ya sea el comienzo de una nueva era urbana o un experimento tipo thriller la Línea, Telosa nos recuerda que atreverse a soñar en grande puede ser el primer paso para cambiar el mundo.