¿Creías que el reciclaje de plástico era la solución definitiva a la contaminación? Un nuevo estudio podría hacerte cambiar de opinión. Investigadores escoceses y canadienses han descubierto que las plantas de reciclaje de plástico podrían ser una fuente insospechada de contaminación por microplásticos. ¿Como? Liberando miles de millones de partículas diminutas en las aguas residuales.
Una revelación que plantea preguntas cruciales: ¿son realmente eficaces los sistemas actuales? ¿Estamos realmente resolviendo el problema del plástico o simplemente estamos creando una nueva forma de contaminación?
El descubrimiento inesperado
Un equipo de investigadores dirigido por Erin Brown de la Universidad de Strathclyde, Reino Unido, llevó a cabo un estudio pionero sobre una planta de reciclaje de plástico de última generación. Los resultados, publicados en el Journal of Hazardous Materials Advances (te los enlazo aqui), son sorprendentes y preocupantes al mismo tiempo.
La planta examinada, que procesa 22.680 toneladas de residuos plásticos mixtos al año, vierte aguas residuales en su una cantidad de microplásticos estimada entre 5,97 millones y 112 millones por metro cúbico. Para dar una idea del alcance del problema, esta concentración es mucho mayor que el que se encuentra en las aguas residuales urbanas o en los ríos.
El proceso de reciclaje de plástico bajo escrutinio
Seamos claros: en el estado en el que nos encontramos, el reciclaje de plástico es fundamental para reducir los residuos (aunque los resultados no lo recompensen). Sin embargo, el hecho es que implica procesos mecánicos que pueden fragmentar el plástico en partículas cada vez más pequeñas. Estos microplásticos, definidos como partículas de entre 1 micrómetro y 5 milímetros de tamaño, acaban en el agua de lavado utilizada durante el proceso de reciclaje.
El estudio reveló que la mayoría de estas partículas tienen un tamaño inferior a 10 micrómetros. Esto los hace particularmente peligrosos para el medio ambiente y potencialmente para la salud humana.
¿Cómo podemos mitigar los "defectos" del reciclaje de plástico?
La planta estudiada ha implementado sistemas de filtración para intentar reducir la liberación de microplásticos. Estos filtros han demostrado ser eficaces para eliminar partículas de más de 5 micrómetros, con alta eficiencia para aquellos mayores a 40 micrómetros.
Sin embargo, la mayoría de los microplásticos de menos de 5 micrómetros siguen escapando de los filtros, terminando en aguas residuales. Se estima que la planta libera anualmente entre 59 y 1.184 toneladas de estas diminutas partículas.
Los microplásticos representan una amenaza creciente para los ecosistemas acuáticos y terrestres. Pueden ser ingeridos por organismos de diversos tamaños, desde plancton hasta peces, entrando así en la cadena alimentaria. Además, estas partículas pueden absorber y transportar contaminantes, amplificando su daño potencial.
Estudios recientes han detectado la presencia de microplásticos por todas partes. En los órganos y en la sangre humano, en la placenta, entre los nuvole. En todos lados.

Se necesitan soluciones más efectivas
Los investigadores destacan la urgencia de mejorar los sistemas de filtración en las plantas de reciclaje de plástico. Sugieren implementar tecnologías que puedan capturar partículas aún más pequeñas antes de que sean liberadas al medio ambiente.
Además, el estudio destaca la necesidad de integrar el monitoreo de microplásticos en las regulaciones de calidad del agua, un aspecto que hasta ahora se ha descuidado en la mayoría de los países.
La paradoja es clara e inquietante: los esfuerzos por reducir la contaminación plástica mediante el reciclaje pueden estar contribuyendo involuntariamente a otra forma de contaminación ambiental.
Perspectivas futuras
La Dra. Brown y su equipo destacan la necesidad de realizar más investigaciones para comprender mejor la magnitud del problema a nivel mundial. Sugieren realizar estudios similares en otras instalaciones de reciclaje en diferentes partes del mundo para tener una imagen más completa de la situación.
Me gustaría subrayar esto: incluso los expertos involucrados en el estudio subrayan que los resultados no deben desalentar el reciclaje, sino impulsar una mejora en las tecnologías utilizadas.
Este estudio nos recuerda que no existen soluciones simples para problemas ambientales complejos. El reciclaje de plástico sigue siendo un elemento crucial en la gestión de residuos plásticos, pero está claro que todavía queda mucho trabajo por hacer para que sea verdaderamente sostenible.