Hay un descubrimiento que está dando mucho que hablar en el mundo de la ciencia. ¿Cual? Un grupo de físicos de la Universidad de Arkansas ha desarrollado circuitos capaces de captar el movimiento térmico del grafeno y transformarlo en corriente eléctrica. El profesor Pablo Thibado, que dirige el equipo de investigación, dice que tales circuitos podrían integrarse en un chip para alimentar pequeños dispositivos o sensores con energía limpia e ilimitada.
La investigación, publicada en la revista Physical Review E (te lo enlazo aqui), confirma la validez de una teoría desarrollada hace tres años. En 2020, físicos de la Universidad de Arkansas teorizaron que el grafeno (una capa de átomos de carbono) albergaba una dinámica que podría aprovecharse para producir energía. Y fue algo casi blasfemo.
Una idea controvertida
La idea de obtener energía a partir del grafeno es bastante controvertida, porque va en contra de la afirmación del famoso físico. Richard Feynman, según el cual el movimiento térmico de los átomos, conocido como movimiento browniano, no puede realizar trabajo.
Sin embargo, el equipo de Thibado descubrió que, a temperatura ambiente, el movimiento térmico del grafeno en realidad induce una corriente alterna (CA) en los circuitos. Es un logro que simplemente se creía imposible.
¿Cómo funcionan estos circuitos que "desafían" las leyes de la física?
Para construir estos circuitos, los investigadores utilizaron dos diodos que convierten la corriente alterna en corriente continua (CC). Estos diodos, dispuestos para permitir que la corriente fluya en ambas direcciones, proporcionan caminos separados en un circuito, generando una corriente continua pulsante que actúa sobre una resistencia de carga. Además, el equipo de investigación descubrió que el comportamiento de encendido y apagado de los diodos amplifica la potencia de salida, en lugar de reducirla.
El próximo paso para el equipo de investigación será comprender si la corriente continua producida se puede almacenar en un condensador para su uso posterior. Si se pudieran hacer millones de estos pequeños circuitos en un chip de 1 milímetro por 1 milímetro, podrían reemplazar las baterías de bajo consumo.
La chispa de una revolución
¿Qué pasaría si algún día nuestros smartphones ya no necesitaran pilas? Gracias a la investigación sobre la energía infinita del grafeno, podemos estar un paso más cerca de un futuro en el que los dispositivos electrónicos funcionen de forma más sostenible e inteligente. Todavía es demasiado pronto para saberlo, pero este descubrimiento podría ser la chispa que encienda un fuego revolucionario en el mundo de la energía.