Los visitantes que entran al AgeLab del MIT se encuentran con un anfitrión curioso: una especie de maniquí con un traje brillante y un par de gafas rojas. Al principio da una impresión extraña, pero el efecto llega cuando piensas en lo que hay debajo del traje: una serie de pesas y cordones elásticos, guantes voluminosos y otros dispositivos. Juntos constituyen AGNES, acrónimo de Age Gain Now Empathy System. ¿Para qué sirve AGNES? Bueno, para envejecer. Al menos mientras lo uses.
prêt-à-porter sénior
AGNES es un conjunto de sistemas portátiles diseñados para simular cómo se siente vivir una persona de 80 años con condiciones de salud crónicas.
El traje puede hacer que el usuario experimente pérdida de masa muscular, reducción de la movilidad y flexibilidad de las articulaciones, pérdida de equilibrio y sensibilidad táctil. Las gafas rojas simulan problemas de visión como pérdida de dioptrías y retinopatía diabética.
Para que es
El traje de AGNES, que te hace envejecer instantáneamente, provoca reacciones sorprendentes y a veces desalentadoras. Pero no es sólo una experiencia impactante que se comparaenvejecimiento: El traje puede ayudar a los diseñadores, ingenieros, gerentes y profesionales de la atención a comprender mejor el mundo físico y social, para crear mejores productos y servicios para las personas mayores.
“AGNES es el resultado de un esfuerzo colaborativo y progresivo de investigadores y estudiantes del MIT”, explica Joe Coughlin, director del MIT AgeLab. “Nació con un soporte para el cuello y bandas elásticas para comprender mejor las dificultades que enfrentan las personas mayores para entrar y salir del automóvil. Hoy en día, se utiliza para brindar a los investigadores y estudiantes una idea de la fatiga, la frustración y el desgaste que experimentan los adultos mayores”.
Gracias a AGNES se diseñan sistemas de transporte público, entornos de retail, dispositivos médicos e incluso packaging de productos.
Una forma, al fin y al cabo, de anticipar el futuro e intentar mejorarlo.