Es una pena que la sal y el azúcar puedan tener efectos nocivos en el cuerpo humano si se toman en exceso. Sin embargo, un poco como las gafas de realidad virtual "engañan" a los ojos para que muestren tres dimensiones donde no existen, un par de varillas electricas especiales hace que la lengua detecte sabores salados incluso en comidas que no los tienen.
Las varitas eléctricas son parte de un esfuerzo del Ministerio de Salud, Trabajo y Bienestar de Japón. Fueron desarrollados conjuntamente por el entorno de investigación de Universidad Meiji y de un fabricante de alimentos japonés llamado Kirin (principalmente conocido por su cerveza). ¿El objetivo? Reducir la ingesta de sal japonesa en al menos un 20%: hoy en día es considerablemente superior a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud.
Menos sal, mismo sabor

En el extremo de uno de los dos palillos hay un contacto metálico que transmite una corriente eléctrica con una particular forma de onda hacia la boca del comensal, potenciando los sabores salados y umami percibidos por sus papilas gustativas.
En pruebas de laboratorio, la estimulación eléctrica adicional de las varillas eléctricas aumentó el sabor salado en casi 1,5 veces. En resumen, puedes reducir la sal en un 30% sin sentir ninguna diferencia. Claro, si la idea es lamer una batería de 9 voltios, no suena bien, pero los investigadores dicen que el nivel de corriente utilizado es indetectable.
No solo palillos
Parece que los japoneses tienen una cuenta abierta con los sabores. Llevan bastante tiempo buscando soluciones (claramente tecnológicas) al problema. En 2016 otro equipo de investigadores japoneses ha creó un tenedor eléctrico que realza los sabores tanto salados como ácidos. En 2020, una empresa llamada SpoonTEK se retiró una cuchara electrica para realzar los sabores y reducir el regusto. Más recientemente, los investigadores incluso han ido tan lejos como para crear pantallas lamibles capaz de recrear una amplia variedad de sabores sin poner comida en tu boca. Lo mismo ocurre con uno extraño "Sintetizador" de sabores desarrollado por la propia universidad japonesa.
La idea de almorzar o cenar sin consumir calorías aún no es una realidad, pero con estos palillos eléctricos los investigadores de la Universidad Meiji sin duda le han dado otro bocado.