Una gran cantidad de cables de fibra óptica franceses resultaron dañados a principios de esta semana. El incidente, que ahora se investiga como un posible acto de "vandalismo" y "sabotaje", desactivó temporalmente Internet en varias ciudades francesas, incluida París.
Hay varios proveedores de servicios de Internet franceses que se quejan de los daños: entre ellos Netflix, SFR y Free.
Fibra óptica claramente cortada
“La región de Ile-de-France ha quedado aislada de Internet, lo que afecta a las redes fijas y móviles. Estamos en contacto con los operadores que están tratando de restablecer el servicio”, anunció la madrugada del miércoles. Cédric o, ministro francés de Asuntos Digitales.
Same Day Free, un proveedor de servicios Internet French tuiteó fotos de varios cables de fibra óptica que parecen haber sido cortados con cortadores de alambre o herramientas similares. El tuit lacónico informó: "Más actos maliciosos en nuestra infraestructura esta noche y esta mañana".
Apagones en todo el país
El aparente sabotaje provocó una ola de cortes de internet en las principales ciudades francesas, incluidas París, Lyon, Reims, Burdeos y Grenoble.
La fiscalía de París inició una investigación penal sobre los accidentes, seguido también por los servicios secretos franceses. No está claro cómo se cortaron los cables, y por ahora no hay sospechosos. En resumen: no sabemos nada.
¿Quién pudo haber sido y por qué? Entre todos los elementos, destaca el momento del episodio, unos días antes de las elecciones presidenciales francesas. ¿Una forma de intimidación o el comienzo de una estrategia de tensión?
No sería la primera vez: en los últimos tiempos, el "terrorismo interno" amenaza con frecuencia las redes informáticas. El año pasado en los Estados Unidos, el FBI detuvo a un hombre que amenazó con volar un centro de datos de Amazon "Cortar el 70% de internet".
En febrero, de nuevo en EE. UU., tres hombres se declararon culpables de un proyecto de conspiración que apuntó a varias subestaciones eléctricas del país.
Mientras tanto, el sabotaje de los cables de fibra óptica franceses sigue siendo un misterio.