El mundo del trabajo ha cambiado radicalmente. La llegada de la pandemia ha hecho necesario crear nuevos hábitos de trabajo, y es justo que incluso la ropa de trabajo sufra cambios.
Nuestra ropa no está "optimizada" para el trabajo inteligente, no está diseñada para que trabajemos cómoda y cómodamente. Vestimos lo que creemos que es mejor, pero no hay estudios ni ropa especialmente diseñada para trabajar desde casa.
Wei Lun Hung, estudiante de diseño de producto en el Royal College of Art, pensó en esto y creó su primera colección.
Hablamos de tres prendas experimentales, que forman la colección denominada Mano de obra usable.
ropa de trabajo moderna
El primer artículo de la colección de ropa de trabajo de Hung se llama Commuter.
Puede considerarse como un modelo provocativo, un vestido destinado a mostrar nuestras malas costumbres.
Al llevar puesto el traje Commuter, los elásticos ocultos en su interior nos empujan a adoptar una posición plegada, como si estuviéramos trabajando en el ordenador.
El objetivo del diseñador es concienciar a los trabajadores, hacerles entender cuáles son los pasos equivocados que no deben tomar.
Il trabajo se inspira principalmente en la vida de los viajeros, que se encuentran en una espacio liminal, un lugar intermedio donde podemos mover nuestras mentes de un estado a otro.
Segundo jefe: Autoadministrador
La ropa de trabajo de Hung continúa con el segundo modelo, que toma el nombre de Self-Manager.
El vestido está marcado por la presencia de almohadillas inflables colocadas en la espalda, los muslos y los isquiotibiales de la rodilla. Está diseñado para permitir que la persona tome el control de su ergonomía, a diferencia del viajero.
Gracias a los cojines hinchables, cualquier silla o apoyo se vuelve inmediatamente más cómodo.
Para construir el vestido, Hung soldó la tela plástica a las costuras, utilizando una capa de papel pergamino para evitar quemaduras.
"Necesitas lograr comodidad física, pero no te acomodes demasiado porque pierdes esa alerta [sensación] de estar en un ambiente profesional“, explicó luego en una entrevista.
La tercera cabeza: Itinerante
Llegamos entonces a la última prenda de su colección de ropa de trabajo, que Hung ha elegido llamar Itinerant.
Descrito de manera simple, Itinerante puede considerarse como una computadora, portátil prácticamente en cualquier lugar.
“Creé este escenario especulativo basado en la realidad donde las grandes empresas cerraron sus oficinas físicas y adoptaron un horario de trabajo flexible. (…) Estaba imaginando este modelo de trabajo móvil verdaderamente dinámico [en el que] la oficina se disuelve en la ciudad y nos convertimos en verdaderos trabajadores nómadas”.
Para hacer la tercera prenda, Hung deconstruyó una computadora portátil y luego la cosió a la ropa. De forma muy clara, el diseñador transmite un mensaje fuerte e intenso: vayamos donde vayamos, el trabajo no nos abandona.
La computadora principal está ubicada en la parte posterior y el torso está completamente envuelto en dos monitores. Un teclado dividido, completo con un mouse controlable con el pulgar, se encuentra en la parte superior de las piernas. Los auriculares, por otro lado, están cosidos directamente a la sudadera con capucha.