Il cambio climático no es una amenaza: es un cataclismo que está ocurriendo ahora. Paralelamente, con un proceso que de alguna manera no lo contrarresta sino que lo acelera, la urbanización está creciendo más rápido que nunca. ¿Cuáles son los resultados de esta combinación?
Hay muchos y parecen inevitables. Uno de ellos es la guerra en curso que las ciudades y pueblos pequeños están luchando contra las inundaciones cada vez más frecuentes que están cobrando numerosas vidas. Situaciones urgentes como estas requieren soluciones duraderas, y una de ellas se puede resumir con un nombre: “ciudad esponja”. ¿De qué se trata?
Hacer "absorbentes" los asentamientos urbanos
Este es un enfoque de planificación urbana que se está probando actualmente en China. Un enfoque indispensable cuando la urbanización excesiva crea megaciudades que “anulan” la capacidad del suelo para absorber líquidos. Por ello, el país ha decidido invertir en la construcción de 30 “ciudades esponja”, con características capaces de garantizar la resiliencia de todas las estructuras urbanas a los eventos atmosféricos, mitigando los riesgos de inundaciones.
¿Igual que? Con una combinación de materiales de drenaje, parques naturales, túneles subterráneos y cuencas de captación.
Las ciudades esponja utilizan el agua a su favor.
Un pequeño ejemplo (lamentablemente siempre debido a circunstancias negativas). La ciudad de Wuhan, afectada por una inundación gigante en 2016, es ahora un buen candidato para convertirse en una "ciudad esponja". Uno de sus principales parques, Xinyu Xie Park, se ha transformado en un espacio con instalaciones de almacenamiento de lluvia. Otro ejemplo: la ciudad de Zhengzhou gastó el equivalente a más de 80 millones de euros para construir una red de drenaje de 5.162 km (3.207 millas). ¿El resultado? Se eliminaron 125 puntos críticos de la ciudad donde siempre se producían inundaciones.
Finalmente, la que es actualmente la "ciudad esponja" más grande del país. Está ubicado en el distrito de Pudong, no lejos de Shanghai. PARA lingang todos los parques y jardines, así como una reserva natural, funcionan como "jardines de lluvia". Permiten que la lluvia sea absorbida por el suelo y las plantas. En combinación, una inversión local masiva transformó todas las aceras de la ciudad reemplazándolas con ladrillos absorbentes de agua.