Un robot minero en el fondo del Océano Pacífico a una profundidad de más de 4 km (13.000 pies) cayó del cable, informó la compañía belga que realizó las pruebas.
Recursos minerales marinos mundiales (GSR), la división de exploración de la empresa de dragado del Grupo DEME, está probando Patania II. Es un prototipo de robot minero de 25 toneladas, en su concesionario en el área de Clarion Clipperton desde el 20 de abril.
La máquina tiene como objetivo recolectar nódulos del tamaño de una papa ricos en cobalto y otros metales cruciales para batería, que salpican el fondo marino de esta zona. Está conectado al barco GSR con un cable de 5 km.
“Durante su última inmersión en el área de GSR, Patania II se separó y ahora está en el lecho marino”, escribe un portavoz de la compañía en un comunicado enviado por correo electrónico. "La operación para volver a conectar el robot minero comienza esta noche y proporcionaremos una actualización a su debido tiempo".
No es un buen comienzo
Las pruebas de GSR son supervisadas por científicos independientes de 29 institutos europeos. Analizarán los datos y las muestras recolectadas por el robot de minería para medir el impacto de la minería en el lecho marino.
Aunque varias empresas y países tienen contratos de exploración de los fondos marinos, la Autoridad Internacional de los Fondos Marinos, el organismo de las Naciones Unidas que tiene el poder de otorgar estas licencias, aún no ha finalizado las regulaciones que rigen la minería en aguas profundas.
Robot minero y excavaciones en alta mar: las dudas son muchas
Críticos, incluido el ambientalista David Attenborough, afirman que la extracción del fondo marino tiene un impacto ambiental impredecible. Google, BMW, Volvo e Samsung apoyaron la petición de una moratoria sobre la minería en aguas profundas.
El doctor Sandra Schoettner, un biólogo de Greenpeace, dijo: "La pérdida de control de una máquina minera de 25 toneladas en el fondo del Océano Pacífico debería dejar la idea de excavar en las profundidades del mar para siempre".
Un portavoz de GSR niega que la compañía haya perdido el control del robot minero Patania II y dice que proyectos como este siempre tienen desafíos que abordar.
La empresa belga dice lo que requerirá un contrato minero solo si la ciencia demuestra que los minerales del fondo marino tienen beneficios. Ventajas desde un punto de vista ambiental y social, quiero decir, en comparación con depender solo de la extracción terrestre.