Segundo Felipe Jaekl, Escritor con formación en neurociencias, el conectoma es la “red completa de neuronas y todas las conexiones entre ellas, llamadas sinapsis”. Siguiendo el ejemplo del libro de Sebastian Seung, "Conectar pero, la nueva geografía de la mente ", argumenta Jaekl:"tu eres tu conectoma".
Es un "Tú" muy complejo: muchos tipos de memoria están mediados por el conectoma. Debemos dejar claro cómo funciona todo el circuito cerebral, dada la complejidad de todas sus conexiones.
El conectoma es una ciudad sin límites
Un simple milímetro cúbico de tejido cerebral contiene aproximadamente 50.000 neuronas. Con un asombroso total de alrededor de 130 millones de sinapsis, según algunas estimaciones. Un cerebro humano completo mide más de 1 millón de milímetros cúbicos y contiene aproximadamente 86 mil millones de neuronas. Una cifra casi equivalente a las estimaciones del número de estrellas de nuestra galaxia.
¿Y queremos hablar del número que representa la suma total de las conexiones sinápticas? Esto es alrededor de 100 billones. Un mapa de conectoma debe contener todos los caminos posibles por los que las señales eléctricas neuronales pueden viajar a través de todas estas conexiones. Solo entonces será posible comprender completamente los patrones de actividad que conforman la memoria y la experiencia subjetiva de una persona.
Mapeo del conectoma: es una palabra
Seung y sus colegas tendrán que acelerar su técnica un millón de veces más rápido para descubrir mapas más grandes del conectoma. Y esto podría ser una limitación bastante seria.
Nos hemos acostumbrado a la idea de que muchas tecnologías pueden o podrían crecer exponencialmente, pero puede haber límites tangibles: quizás esta "aceleración" no pueda alcanzar órdenes tan grandes, ser un millón de veces más rápida, porque simplemente chocaría con la física.
¿Cómo fue esta historia de inmortalidad?
Jaekl señala que poco después de la muerte, el conectoma comienza a decaer. Pero, se pregunta, ¿y si pudiera conservarse? Como se mencionó, para mantener la estructura exacta de todo el conectoma, se necesitaría un método de conservación en el que cada neurona y cada una de sus conexiones sinápticas se mantuvieran en su lugar. Un requisito que debe repetirse aproximadamente 100 billones de veces, para cada individuo humano.
Las implicaciones de tal técnica de preservación del cerebro serían profundas. Si la premisa es correcta y usted es de hecho su conectoma, que contiene todos sus recuerdos y su identidad, entonces USTED está preservado. Se conservan tanto la partitura como el instrumento, el pensamiento y la fábrica que los produce.
La Fundación para la Preservación del Cerebro
Todas estas reflexiones llevaron a la formación en 2010 de la Fundación para la Preservación del Cerebro (BPF), una fundación que asigna becas y premios en efectivo a los mejores métodos de conservación del conectoma.
Los estudios en animales dicen que el conectoma se puede almacenar mediante congelación criogénica a -135 ° C (-275 ° C).
La idea es preservar, con el conectoma, los recuerdos para la inmortalidad futura.
Partidarios de este procedimiento (Hablé de eso aquí sobre el Nectoma) encuentran muchos límites porque, de hecho, el procedimiento implica una eutanasia real.
Y esto produce muchas dudas.
La cura (muerte) es peor que el problema: la memoria viva perdida. Sin embargo, sea Ken Hayworth que Roberto McIntyre (investigadores y defensores de esta práctica) creen que la vitrificación, aunque fatal, ofrece una especie de inmortalidad, si la esencia de alguien puede escanearse y luego transferirse de alguna manera a un medio artificial.
Un medio que esencialmente reemplazaría al cerebro, desde un punto de vista funcional. Un nuevo “contenedor” que debe conducir de manera precisa y suficiente los modelos de actividad neuronal que sustentan la memoria, la identidad y la experiencia para evocar la conciencia de todos.
El desafío de encontrar un "hogar electrónico" para los pensamientos, los recuerdos, la experiencia y la identidad. Un asiento de "inmortalidad electrónica".
En principio, no sería imposible cargar el conectoma en un ordenador: vínculos entre neuronas biológicas y artificiales ya están en la fase experimental.
Sin embargo, los obstáculos para una interfaz cerebro-computadora no invasiva o mínimamente invasiva que funcione son muchos. Debe hacer que el dispositivo sea lo más pequeño, flexible y biocompatible posible, lo cual es bastante difícil. Para uso médico, estimular y detectar la actividad cerebral es igualmente difícil, ya que las señales neuronales son muy pequeñas.
Actualmente, existen pocos métodos capaces de recopilar mucha información del cerebro lo suficientemente rápido como para hacer que el objeto al que el cerebro se conecta funcione. Ya sea una prótesis de brazo, un simulador de vuelo o un dron, cuantos más datos recopile, más lento se volverá y el rendimiento disminuirá. Pero estos problemas "técnicos" palidecen ante un problema aún mayor.
El problema mucho mayor es el de la conciencia.
Suponiendo, como un experimento mental, que el conectoma y la vida de los recuerdos de una persona pueden congelarse y descongelarse de esta manera, ¿de qué serviría si no hubiera estaba asociado sin conciencia ?
Jaekl señala que todavía cambiamos a lo largo de la vida, en el sentido de que no somos realmente la misma persona cuando somos viejos que cuando éramos jóvenes. El conectoma cargado en una computadora podría ser solo eso: una mezcolanza de información sin una persona consciente que la conecte.
Una cosa que los investigadores de experiencias cercanas a la muerte (ECM) han notado es que un humano puede ser consciente mientras está clínicamente muerto. Pero esto implica que la conciencia no puede, en ningún caso, ser el tipo de cosa que pueda ser preservada por los métodos de estos investigadores.
La afirmación de que el yo se puede encontrar en el conectoma todavía está lejos de ser probada, y es posible que nunca haya forma de determinar si la conciencia puede existir en una máquina.
Felipe Jaekl
La pregunta final sobre el conectoma, la inmortalidad y todo lo demás
En nuestro universo todo parece transitorio, y cada vez más físicos especulan que el camino es algo unidireccional y se dirigió al caos.