Bioingenieros de la Universidad de California, Los Ángeles, diseñaron un dispositivo similar a un guante que puede traducir el lenguaje de señas en palabras que se pueden escuchar en tiempo real. Investigación fue publicado en la revista Nature Electronics.
junio chen, profesor asistente de bioingeniería en UCLA Samueli School of Engineering es el autor principal de la investigación. “Nuestra esperanza es que esta tecnología se convierta en una herramienta simple para traducir el lenguaje de señas y comunicarse directamente con quienes no lo conocen sin la necesidad de un intermediario”, dijo. "También esperamos que pueda ayudar a más personas a aprender el lenguaje de señas por sí mismas".
Cómo se fabrican los guantes de traductor
El sistema consta de un par de dispositivos portátiles. Estos son guantes con sensores delgados y estirables que recorren la longitud de cada uno de los cinco dedos. Estos sensores, fabricados con hilos conductores de electricidad, detectan los movimientos de las manos y la posición de los dedos que indican letras, números, palabras y frases individuales.
Luego, el dispositivo transforma los movimientos de los dedos en señales eléctricas, que se envían a un dispositivo de muñeca del tamaño de una moneda. La tarjeta transmite estas señales de forma inalámbrica a un teléfono inteligente que traduce el lenguaje de señas en palabras, a una velocidad de aproximadamente una palabra por segundo.
Los investigadores también agregaron sensores adhesivos a las caras de los evaluadores (entre las cejas y los lados de la boca) para capturar las expresiones faciales que son parte del lenguaje de señas.
Traducir el lenguaje de señas es más fácil
Los sistemas portátiles anteriores que ofrecían traducción al lenguaje de señas estaban limitados por dispositivos voluminosos y pesados o eran incómodos de usar, dijo Chen.
El dispositivo desarrollado por el equipo de UCLA está hecho de polímeros livianos, rentables pero duraderos y elásticos. Los sensores electrónicos también son muy flexibles y económicos.
Al probar el dispositivo, los investigadores trabajaron con cuatro personas sordas que usan lenguaje de señas. Los porteadores repitieron cada gesto con la mano 15 veces. Un algoritmo de aprendizaje automático personalizado transformó estos gestos en letras, números y palabras que representaban. El sistema reconoció 660 signos, incluidas cada letra del alfabeto y números del 0 al 9.
La mejora de esta tecnología permitirá romper una barrera importante. Su miniaturización asegurará que un día, en lugar de guantes, pueda haber simples anillos portátiles capaces de traducir el lenguaje de señas. O se abrirá a entornos de realidad virtual donde hay un diálogo inmediato entre todos, independientemente del idioma (verbal o no verbal) conocido.