Los marines estadounidenses están probando un arma nueva y no letal llamada SPECTRE (un acrónimo de tetanización electrónica pulsada de armas pequeñas a alcance extendido).
SPECTRE es un arma que puede alcanzar su objetivo a más de 30 metros de distancia: para ser claros, una Taser de última generación tiene un alcance de unos 8 metros.
La bala se puede disparar desde cualquier escopeta de calibre 12 y fue desarrollada por Harkind Dynamics, empresa de investigación tecnológica quien recibió fondos del Departamento de Defensa de los Estados Unidos.
Una bala con frenos
Para evitar el daño obvio y peligroso de una bala disparada desde una escopeta, Harkind Dynamics ha agregado un pequeño paracaídas que se desplegó justo antes de dar en el blanco. Según la compañía, el paracaídas reduce a la mitad la velocidad de la bala.
A menos de un metro del objetivo, la bala SPECTRE abre un pequeño paracaídas y dispara tres flechas de electrodos. Los dardos son lo suficientemente afilados como para atravesar la ropa y dar en el blanco.
SPECTRE: ¿“no letal”?
"Si el paracaídas no se abre, existe el riesgo de un impacto directo con un traumatismo contundente y una posible perforación", dice un portavoz de la Omega Research Foundation, un observatorio de tecnología de seguridad con sede en el Reino Unido.
Si golpea la cabeza, existe el riesgo de lesiones graves o la muerte.
En otras palabras, todavía no está claro si SPECTRE puede garantizar la seguridad de su objetivo. Los expertos ya tienen dudas. Y yo también.
El desarrollo de esta nueva arma no es una buena señal en los Estados Unidos que ya se caracterizan por la controversia y las protestas por el uso de la fuerza. Varios manifestantes estadounidenses informaron de lesiones oculares graves, en algunos casos permanentes, por balas de goma disparadas por la policía durante las protestas en curso de Black Lives Matter.