El fondo del mar puede ser un lugar bastante difícil.
Los volcanes y respiraderos submarinos a lo largo de las fallas emiten cantidades significativas de gas submarino, incluido CO2, dióxido de carbono.
Un sinfín de ejércitos de bacterias forman criaturas marinas muertas en metano natural.
Y una nueva investigación japonesa nos muestra enormes reservas de gases de efecto invernadero distribuidos justo debajo del fondo marino.
En un estudio publicado el mes pasado en la revista científica Geophysical Research Cartas, un equipo de investigación descubrió uno de estos depósitos en una cuenca ubicada en el punto de encuentro entre Japón y Filipinas. Al analizar los datos sísmicos para mapear la estructura de fallas, el equipo ha identificado una enorme "bolsa" de gas que se extiende unos 4 km de longitud y que puede contener más de 100 millones de toneladas de CO2, metano o una mezcla de los dos gases.
¿Recurso o peligro?
Depende del contenido. Este enorme campo de gas submarino puede representar una oportunidad energética, pero también una enorme bomba de gases de efecto invernadero lista para liberarse a la atmósfera (como si no estuviéramos ya en mal estado).
Si el gas en la bolsa es solo CO2, lo calculo en cantidades de alrededor de 50 millones de toneladas
Takeshi Tsuji, Instituto Internacional de Investigación de Energía Carbono-Neutral de la Universidad de Kyushu.
Una sección transversal es la cantidad equivalente a las emisiones anuales de CO2 de todos los automóviles privados en Japón.
Investigación
Tsuji y sus colegas navegaron barcos científicos a lo largo del tramo de mar afectado, utilizando un dispositivo para generar pequeñas ondas sísmicas desde varios ángulos. Al medir las variaciones de estas olas a medida que pasaban por el lecho marino, el equipo perfiló lo que se encuentra debajo.
"Las ondas de este tipo suelen viajar más lentamente en los gases que en los sólidos", dice el coautor del estudio. andri hendriyana, también investigador del Instituto Internacional para la Investigación de Energías Carbono-Neutro. "Al examinar la velocidad de estas ondas, hemos identificado estas enormes reservas y estamos tratando de obtener información sobre qué tan saturados están estos gases".
En resumen, la "mancha" de gas bajo el agua está ahí. Y como él bajo el fondo del mar hay otros, incluso más grandes (así como reservas de agua dulce).