Todos miran al cielo esperando los drones que entregan envíos y pierden el desarrollo de tecnologías cada vez más avanzadas para robots para entregas terrestres.
Los robots de ruedas no serán tan encantadores como sus primos voladores, pero con menos riesgos legales, serán empleados mucho antes. Los servicios basados en drones inevitablemente pagarán el precio de tener que llevar a cabo un proceso prácticamente perfecto para sortear los riesgos asociados con volar.
El último concepto que ha alcanzado la etapa de un prototipo en ejecución es el robot autónomo Rev-1 de la startup estadounidense. Refracción AI.
Fruto del trabajo de Matthew Johnson-Roberson y Ram Vasudevan, dos profesores de la Universidad de Michigan, Rev-1 se mueve rápidamente sobre tres ruedas en lugar de cuatro o seis como ya se vio en otro lugar.
Las ruedas y el compartimento de carga proporcionan al Rev-1 una apariencia similar a la de otros prototipos como el de Tecnologías de la nave espacialo robots de entrega sacados de FedEx y Amazon.
Otras variaciones más radicales incluyen Digit, el robot Agility Robotics. Un droide bípedo capaz de caminar y sortear escalones y otros obstáculos que la mayoría (no todos) de los robots con ruedas tienen problemas para sortear.
Rev-1 pesa alrededor de 45 kg y puede alcanzar velocidades de 24 kilómetros por hora, un 30% más rápido que el robot homólogo de Starship Technologies. Su compartimento de carga ofrece más de 450 litros de capacidad, un tamaño que permite alojar fácilmente cuatro o cinco grandes bolsas de supermercado.
Al igual que los Nuros, vehículos autónomos que ya entregan pizzas para la cadena Domino's, Rev-1 le permite acceder a la entrega ingresando un código desechable a su llegada.
Sector técnico
Técnicamente, Rev-1 marca una diferencia importante con los competidores.
De hecho, el vehículo autónomo utiliza 12 cámaras y un sistema de sensores capaz de agregar datos sobre el contexto circundante a las imágenes. Un pequeño sistema de radar y ultrasonido completa los "sentidos" del robot y le permite saber siempre en qué espacio se mueve.
Johnson-Roberson señala que este sistema es confiable hasta el punto de que puede funcionar sin escáneres láser, la costosa tecnología LIDAR utilizada por otros. Una elección que reduce enormemente el costo de Rev-1, que se establece en alrededor de 5000 euros.
"Es ligero, manejable y lo suficientemente rápido como para aprovechar tanto las carreteras como las ciclovías", dice el CEO de Refraction AI.
Sus características también hacen que sea indiferente trabajar con condiciones climáticas favorables o adversas, que puede ralentizar otros tipos de vehículos.