Los vehículos autónomos del futuro podrán explotar espacios de una manera radicalmente diferente.
Sin preocuparse más por guardar un motor voluminoso en el capó o un sistema de dirección en el interior, la cabina será un espacio completamente nuevo.
El concepto de vehículo como transportista cambiará mucho, y pasaremos al concepto de vehículo como “unidad de vivienda móvil”. Una nueva habitación en nuestro hogar, pero autopropulsada. Un lugar que nos lleva a donde queremos ir, mientras continuamos relajándonos o trabajando de forma remota, como si todavía estuviéramos en casa.
El transporte público también cambiará considerablemente de forma: de la lógica del bus a la del “Pod”, de la cápsula de pasajeros. Los vehículos autónomos tendrán un espacio reducido para la misma capacidad y una maniobrabilidad extrema para cruzar fácilmente todas las áreas de la ciudad, incluso las calles más estrechas o las áreas adyacentes a las áreas peatonales.
Los espacios de maniobra también cambiarán, especialmente con sistemas como el adoptado por los vehículos Protean, capaces de girar sobre sí mismos en 360 grados. Cada rueda incorpora un pequeño motor eléctrico, suspensión, dirección, freno y dirección asistida.
Protean desarrolló su sistema integrado hace 6 años, pero estaba tan avanzado que tenía dificultades para integrarse en el mercado. Las ruedas de Protean son claramente mucho más pesadas que las estándar, lo que agrega libras justo donde no deberían estar en un automóvil tradicional: debajo de la suspensión.
También están más expuestos al daño por impacto: una cosa es pinchar un neumático y otra destruir un sistema motor completo haciendo un agujero.
Pero el mercado emergente de cápsulas autónomas de transporte de pasajeros no tiene mucho interés en la velocidad y el rendimiento. Se centra más bien en el espacio interior, en la maniobrabilidad y en la capacidad, todo lo que necesita este sistema Protean satisface perfectamente
No puedo esperar para sentarse y relajarse mientras viaja.