El circo acrobático alemán Roncalli ha alardeado durante décadas de sus números espectaculares con animales: hoy utiliza una batería de proyectores láser y lentes futuristas para producir espectáculos en 3D con animales holográficos.
Es un compromiso tecnológico respetable y abre el camino para una nueva generación de circos que a través de nuevas soluciones renovarán la magia tradicional de las representaciones con prácticas más éticas y respetuosas de los animales.
Animales: cero
Para salvar el sufrimiento y el dolor de los pobres animales a menudo entrenados en sesiones muy difíciles, en Roncalli trabajaron para obtener modelos 3D sorprendentemente detallados: el gasto fue casi medio millón de euros, pero parece que valió la pena.
Desde los años 90 esta familia circense ha ido limitando progresivamente el uso de animales, pero con esta solución revolucionará todo su repertorio: en la gigantesca arena los “holo-animales” se integran perfectamente en las actuaciones de deportistas y payasos.
El éxito fue sensacional: el año pasado el regreso de la imagen de la iniciativa y la indudable belleza del espectáculo atrajo a más de 600.000 espectadores.
Activistas por los derechos de los animales celebran: "Este es el futuro del espectáculo de circo mágico", dados Jan Crema, Presidente de Animal Defenders International. “Una actuación que todos pueden disfrutar, y que no reduce a los seres vivos a objetos”.
Otras asociaciones como la PETA: "La iniciativa de sacar a los animales de los circos es la fuerza motriz de todo el movimiento del entretenimiento", da a conocer un comunicado de prensa de la asociación.
En mi pequeño aplauso también: viejas prácticas a menudo violentas están dando paso a verdaderos himnos a la creatividad y la magia de la combinación hombre-tecnología.