¿Quién de ustedes duerme en un colchón con memoria de forma hecho de espuma de látex?
No quiero saber si te sientes cómodo o no (sí): solo sé que en el futuro se podría usar un material similar para crear partes artificiales del cuerpo. Un grupo de investigadores de la Universidad de Cornell usó su nueva "espuma de elastómero" para hacer una bomba que se ve y funciona de manera similar a la de un corazón humano.
La espuma de silicona elástica se puede moldear a cualquier forma a través de un proceso similar al de la impresión 3D.
Una vez estabilizado, el material es muy suave y elástico: se puede estirar más del 600 % y sus microporos permiten que los líquidos pasen a través de él: la densidad de estos diminutos agujeros también se puede "ajustar" para cambiar la presión de los líquidos que fluyen en su interior. Otra característica extraordinaria: el material se puede hacer para lograr la forma deseada cuando se somete a presión. Por ejemplo, un objeto esférico puede volverse ovalado cuando se llena de agua o aire.
Para moldear el material en forma de corazón (excepto los ventrículos), los científicos construyeron un "esqueleto" de fibra de carbono alrededor del cual se "vertía" el material. Es un proceso muy rápido, que permitiría hacer corazones (u otras partes del cuerpo) perfectamente capaces de adaptarse a las características de cada individuo.
Los investigadores ya comenzaron a construir una mano con la misma técnica, mientras trabajaban para hacer que el material fuera completamente biocompatible y, por lo tanto, aprobado por las autoridades médicas.
Nota de Gianluca: esta investigación abre a la posibilidad futura de imprimir órganos y partes del cuerpo "a pedido" personalizados según la apariencia de cada uno.