Un equipo de investigadores ha desarrollado el primer prototipo de un acelerador de partículas en miniatura, que utiliza ondas de terahercios en lugar de radiofrecuencias. Un solo módulo de acelerador tiene solo 1 XNUMX/XNUMX centímetros de ancho y XNUMX milímetro de espesor. La tecnología de terahercios podría permitir la miniaturización de todo el aparato: este es el objetivo del grupo dirigido por Franz Kärtner, del Center for Free-Electron Laser Science.
El prototipo fue presentado con un artículo en el periódico Naturaleza científica.
El autor plantea la hipótesis de numerosos campos de aplicación de los aceleradores de Terahercios: la medicina y la física de partículas sobre todo.
¿Qué es la onda de Terahercios?
También llamado rayo T, es una radiación electromagnética que tiene un espectro entre 300 GHz y 3 THz. En el espectro electromagnético es sólo una especie de término medio entre infrarrojos y microondas. No es visible para el ojo humano y tiene una longitud de onda más larga de la que podemos percibir. Kärtner, que también es profesor de la Universidad de Hamburgo y miembro del Centro de Imágenes Ultrarrápidas de Hamburgo (uno de los centros de excelencia alemanes sobre el tema) utilizaron esta frecuencia mucho "más corta" que la adoptada tradicionalmente, destacando la ventaja de poder reducir todo el sistema.
El prototipo está funcionando, un único módulo ha producido un aumento de la energía de los electrones cuantificable en 7 keV (kiloelectronvoltios). Según los científicos este resultado podría dar lugar a implantes capaz de producir un aumento de hasta 20 MeV (megaelectronvoltios), es decir, 20 veces más potente que los aceleradores actuales.
Y aquí el LHC de Ginebra ya me parece el equivalente a los viejos ordenadores que llenaban una habitación entera.