Un grupo de investigadores alemanes de AutoNOMOS Labs ha desarrollado un sistema que le permite conducir un vehículo simplemente a través de los pensamientos del conductor: esto es lo que se dice que mira hacia el futuro.
El primer paso fue crear vehículos autónomos, capaces de responder a los comandos de un iPhone: El desarrollo de un sistema de control basado en ondas cerebrales tomó más tiempo. Es una computadora capaz de leer las señales electromagnéticas de los sensores usados por el piloto, que puede acelerar, frenar y girar con un solo pensamiento.
El sistema aún no está perfeccionado (hay un retraso entre la orden 'mental' y la ejecución, y en el camino se produciría una masacre) pero prueba fehacientemente que el principio funciona.
¿Y ahora? - Imagino un futuro de taxis automáticos, capaces de seguir direcciones en las que el pasajero sólo tiene que pensar. Sólo hay un problema: Lucio Dalla, en la espléndida 'Cuán profundo es el mar', argumentaba (con razón) que el pensamiento no se puede encerrar. ¿Qué pasa si una chica hermosa me viene a la mente mientras conduzco, tal vez en medio de una recta?
Piensa en la respuesta que prefieres, en el silencio (por ahora seguro) de tus cabezas.